La Ciencia Cristiana es un sistema de creencias asociado con la Iglesia Cristiana, fundada en Nueva Inglaterra en 1879 por Mary Baker Eddy, cuya obra principal, Ciencia y Salud con la clave de las Escrituras, describe sus doctrinas. Explicadas en detalle. Este movimiento religioso enfatiza la realidad del espíritu, creyendo que el mundo material es una ilusión y que la enfermedad es un error psicológico, por lo que la curación debe lograrse a través de la oración en lugar de depender del tratamiento médico.
Eddy describió la Ciencia Cristiana como un regreso al "cristianismo primitivo con sus elementos curativos perdidos".
En la Ciencia Cristiana, la cosmología cristiana difiere significativamente del cristianismo tradicional. Muchos conceptos fundamentales del cristianismo se reinterpretan a través de la interpretación de Eddie, especialmente la exploración de la Trinidad, la divinidad de Jesús, la expiación y la resurrección. Eddy creía que la esencia de la realidad era puramente espiritual, y sus teorías sobre la enfermedad y la muerte eran particularmente controvertidas.
Si bien los miembros de la Ciencia Cristiana no rechazan el uso de servicios médicos, generalmente creen que la oración es más poderosa que la medicación. Esta visión ha llevado históricamente a que varios seguidores y sus hijos enfrenten responsabilidades legales por negligencia médica, y la controversia que ha causado ha atraído gran atención pública.
La creencia central de la Ciencia Cristiana es que "la realidad es conciencia", una visión que está estrechamente vinculada a los movimientos espirituales de la época, como el movimiento del "Nuevo Pensamiento", ambos enfatizando la influencia de la mente en la realidad. Eddy, sin embargo, vio la Ciencia Cristiana como una contribución única a estas ideas, considerándola la revelación final.
Eddie enfatizó que el mundo material es una ilusión, mientras que el mundo espiritual es la verdadera realidad.La teología de Eddie cree que Dios no sólo es un Dios personal, sino también "todo y omnipresencia", y concede importancia a términos como "amor" y "verdad". En las enseñanzas de Eddy, el cielo y el infierno son vistos como estados de conciencia, mientras que la oración en la Ciencia Cristiana no requiere mendigar, sino que disipa la ilusión de la materia a través del argumento silencioso de autoafirmación. Respuestas y desafíos sociales
El auge de la Ciencia Cristiana provocó resistencia en los círculos cristianos tradicionales. Por ejemplo, algunos cristianos conservadores la consideraban una herejía. Desde el siglo XIX, las opiniones de Eddy sobre Ciencia y Salud han sido objeto de muchas críticas, lo que ha influido en mayor o menor medida en el desarrollo de la Ciencia Cristiana, e incluso en algunas ocasiones ha llegado a cuestionar sus creencias básicas.
Los críticos a menudo describen a la Ciencia Cristiana como una "secta", argumentando que sus enseñanzas violan las creencias cristianas ortodoxas.
La vida personal de Eddy también tuvo un impacto en el desarrollo temprano de la Ciencia Cristiana. A pesar de los desafíos que enfrentó, incluidas las dificultades dentro de su familia, continuó impulsando el movimiento e incluso estableció numerosas revistas y editoriales durante su vida. Después de su muerte en 1910, el movimiento de la Ciencia Cristiana continuó creciendo y se vio envuelto en numerosas controversias.
Hasta la fecha, la Ciencia Cristiana todavía tiene más de 2.000 iglesias en todo el mundo, pero su número de creyentes ha disminuido ligeramente en las últimas décadas. A pesar del escepticismo externo y los desafíos internos, la Ciencia Cristiana aún mantiene su influencia en ciertas comunidades y continúa promoviendo sus creencias en todo el mundo.
En el siglo XXI, ¿podrá este movimiento religioso encontrar nueva vitalidad, o seguirá enfrentándose a contracción y desafíos?
¿Cómo reinterpreta la Ciencia Cristiana el significado de la fe y la práctica en el contexto de las creencias tradicionales? Sin duda, es una pregunta que vale la pena que reflexionen sus seguidores, que todavía están en proceso de exploración.