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¿Lo sabías? ¡Aquí está el secreto para mejorar tu tasa de éxito en el embarazo!
Prepararse para el embarazo es un viaje lleno de expectativas, y en este viaje, la planificación temprana de la salud es particularmente importante. Una consulta previa a la concepción (también llamada consulta previa al embarazo) es una discusión en profundidad con un profesional de la salud para una persona interesada en un futuro embarazo. Esto no sólo ayuda a optimizar la salud, sino que también reduce posibles complicaciones durante el embarazo y mejora el entorno para el crecimiento y desarrollo fetal.
Los expertos en salud recomiendan que cualquier mujer que quiera quedar embarazada acuda a una institución médica para un examen y una consulta previos al embarazo entre 3 y 6 meses antes de intentar realmente quedar embarazada.
Este período de tiempo puede ayudar a las mujeres a prepararse mejor para una concepción y un embarazo exitosos y reducir los riesgos de salud controlables. Los controles de salud prenatales recomendados incluyen la evaluación de posibles complicaciones del embarazo y modificaciones del estilo de vida, como aumentar la ingesta de ácido fólico para reducir el riesgo de defectos del tubo neural, dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol.
A pesar de ello, muchas mujeres todavía no valoran la importancia del asesoramiento previo al embarazo. Según las estadísticas, el 38% de los embarazos no son deseados, lo que lleva a muchos expertos a pedir que todas las mujeres que puedan quedarse embarazadas reciban este asesoramiento, lo hayan planeado o no. En cuanto a la evaluación, generalmente incluye un cuestionario detallado para conocer los antecedentes médicos y familiares de la mujer.
Un chequeo de salud previo al embarazo es como un chequeo de salud para un bebé, diseñado para detectar posibles problemas de salud para garantizar la salud de la madre y el feto.
Contenido de la consulta sanitaria preliminar
Cuestionario
El cuestionario cubre muchos aspectos de los sistemas corporales, no sólo el sistema reproductivo, sino también información sobre el estilo de vida y los antecedentes familiares. Generalmente se completa antes de visitar a un médico para recopilar información de salud necesaria.
Análisis de sangre Los análisis de sangre pueden incluir un hemograma completo, que puede ayudar a revelar anemia o infección, las cuales podrían afectar la capacidad de una mujer de quedar embarazada y la salud de su feto. Análisis de orinaUn análisis de orina puede mostrar si hay proteínas o sangre en la orina, lo que puede indicar una infección o un problema renal que podría afectar un embarazo saludable.
El papel de los profesionales médicosUna vez que se identifica la condición de salud subyacente de una mujer, su profesional de la salud llevará a cabo una evaluación continua y recomendará ajustes a cualquier medicamento que pueda afectar el embarazo. Además, ciertas enfermedades como la diabetes reciben especial atención.
El papel de la mujerLas mujeres también juegan un papel vital en este proceso. Cambiar su estilo de vida, dejar de fumar y beber, aumentar el ejercicio y mejorar su salud mental son cosas que pueden controlar y mejorar. Muchos médicos también recomiendan que las mujeres tomen vitaminas prenatales antes de quedar embarazadas para mejorar su salud general.
Situación en Estados Unidos
En los Estados Unidos, las recomendaciones de asesoramiento previo al embarazo incluyen: altura y peso para calcular el IMC, presión arterial, historial médico, examen abdominal y pélvico, detección de rubéola y varicela, y detección de gonorrea y clamidia para grupos de alto riesgo.
A través de un asesoramiento integral previo al embarazo y una evaluación genética, podemos prepararnos para un embarazo saludable y minimizar los riesgos del mismo.
Por lo tanto, para aumentar la tasa de éxito del embarazo y garantizar la salud de la madre y el bebé, no se puede ignorar la preparación sanitaria temprana. ¿Estás lista para comenzar este maravilloso viaje y brindarle a tu futuro bebé un comienzo más saludable?
