En el cráneo humano, los huesos cigomáticos, también conocidos como pómulos o huesos malares, son un par de huesos irregulares ubicados en los lados superior y exterior de la cara, formando las paredes laterales y el suelo de las cuencas de los ojos. La apariencia y estructura de los pómulos tiene un profundo impacto en los contornos y el atractivo de nuestro rostro, haciéndolos extremadamente importantes desde el punto de vista estético.
La forma y la altura de los pómulos juegan un papel importante en el atractivo general de una persona.
El hueso cigomático tiene forma de rombo y consta de tres apófisis principales: la apófisis frontal, la apófisis temporal y la apófisis maxilar. La relación de estas protuberancias con otros huesos le da a los pómulos una posición estructural importante en la cara. La superficie del hueso cigomático tiene una forma convexa y hay un pequeño orificio en su centro llamado faceta cigomática, que se utiliza para que pasen los vasos sanguíneos y los nervios.
En muchas culturas, los pómulos altos se consideran una de las características distintivas de la belleza facial. Las diosas de las esculturas chinas antiguas a menudo se representan con "frente ancha, cejas levantadas, pómulos altos y bocas llenas". De manera similar, las imágenes de los guerreros y caballos de terracota de Qin Shihuang suelen mostrar esta característica.
Los pómulos altos no sólo se consideran un símbolo de belleza, sino también un signo de estatus social.
El desarrollo de los pómulos suele comenzar en la octava semana de embarazo y continúa con la edad después del nacimiento. El crecimiento de los pómulos se ve afectado por una variedad de factores, incluidos la genética y el medio ambiente. Esto hace posible que diferentes culturas vean la estética de los pómulos de manera diferente.
En la sociedad moderna, algunas personas optan por someterse a un aumento de pómulos o a una cirugía plástica para mejorar el atractivo facial. Este tipo de cirugía suele aumentar la altura de los pómulos para darle más tridimensionalidad al contorno facial y conseguir un efecto de "supermodelo". Para las personas que desean mejorar la apariencia de su rostro, una cirugía como esta puede marcar una diferencia dramática.
La cirugía plástica de los pómulos se está volviendo cada vez más común en la sociedad moderna, lo que refleja la búsqueda de la belleza por parte de las personas.
En algunas culturas, los pómulos están estrechamente relacionados con el atractivo. En algunas zonas, la altura de los pómulos se considera un símbolo de salud y belleza. Este significado cultural no se limita a los individuos, sino que se extiende al conocimiento amplio de la sociedad.
Por ejemplo, en las sociedades occidentales, los pómulos altos suelen considerarse un signo de belleza femenina, mientras que en algunas culturas africanas los rasgos faciales redondeados se consideran un signo de belleza. Estas diferentes percepciones han contribuido a la popularidad de diversas tendencias y procedimientos de belleza.
En los últimos años, numerosos estudios científicos han intentado explorar el impacto de los pómulos en el atractivo. Estos estudios muestran que la altura y la forma de los pómulos y su proporción con el resto del rostro influyen en nuestras primeras impresiones de otras personas.
Las características de los pómulos pueden influir directamente en el atractivo de una persona, un hallazgo clave en la investigación científica.
Según múltiples encuestas, las personas que están satisfechas con su apariencia tienden a tener más confianza. Esto ha llevado a muchas personas a buscar cirugía plástica para mejorar sus pómulos y con ello mejorar su confianza y su autoimagen.
Al explorar la estructura facial de los pómulos y su impacto en el atractivo, podemos ver la intersección entre la cultura, la ciencia y la autopercepción individual. Los pómulos no son sólo una parte de la cara, también tienen un significado cultural y emociones individuales. Entonces, ¿cómo te sientes con tus pómulos?