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¿Su salud sexual realmente cumple con la definición de la OMS?
La salud sexual y reproductiva (SSR) es un campo de investigación, atención sanitaria y acción social que aborda el bienestar sexual y reproductivo de las personas en todas las etapas de su vida. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud no es sólo la ausencia de enfermedades o dolencias, sino “un estado de completo bienestar físico, mental y social”. La salud sexual se define como “un estado de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad”. Esta definición enfatiza una actitud positiva y respetuosa hacia el sexo y las relaciones sexuales, y la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras.
“La salud sexual requiere respetar, proteger y hacer realidad los derechos sexuales de todas las personas.”
Otro aspecto importante de la salud sexual y reproductiva es su vínculo con la capacidad de elegir de un individuo, incluida la libertad de elegir cuándo y cómo tener relaciones sexuales. Sin embargo, el derecho a acceder y mantener este estatus a menudo está influenciado por factores sociales, económicos y culturales.
Desafíos actuales
A pesar de la creciente conciencia mundial sobre la salud sexual y reproductiva, muchas personas todavía enfrentan desafíos para disfrutar de estos derechos. Según el informe de la Comisión Guttmacher-Lancet, 4.300 millones de personas en todo el mundo enfrentan servicios de salud sexual y reproductiva inadecuados, y muchas mejoras se ven obstaculizadas por un compromiso político insuficiente, recursos insuficientes y una discriminación persistente.
“La salud y los derechos sexuales y reproductivos son fundamentales para el desarrollo sostenible porque están estrechamente vinculados con la igualdad de género y el bienestar de las mujeres”.
El impacto de la desigualdad social
Los servicios de salud reproductiva son más graves en áreas desiguales, ya sea debido al estatus socioeconómico, el nivel educativo o la supresión de espacio. No sólo eso, sino que ciertos grupos de personas, como los adolescentes, las mujeres y las minorías sexuales, a menudo enfrentan desafíos mayores. En muchas sociedades, una educación sexual inadecuada para los adolescentes les impide protegerse eficazmente, lo que aumenta aún más el riesgo de embarazo precoz o enfermedades de transmisión sexual.
Adolescentes y salud sexual
El desafío de los problemas de salud sexual de los adolescentes radica en la falta de recursos y conocimientos disponibles, así como en la presión social y las restricciones culturales que enfrentan. En algunos países, los adolescentes deben casarse y tener hijos a una edad temprana, lo que genera muchos riesgos para la salud y problemas psicológicos. Esto no sólo afecta la salud física y mental de los adolescentes, sino que también afecta el desarrollo de toda la familia y la comunidad.
“El aumento de las tasas de fertilidad adolescente es inseparable de las condiciones socioeconómicas y de salud”.
Mujer y salud materna
Según la OMS, el 95% de las muertes maternas ocurren en países de bajos ingresos, lo que está directamente relacionado con las diferencias en la calidad de la atención, la equidad médica y la situación económica. Cuando una mujer vive en la pobreza, suele resultar difícil obtener la atención de salud materna necesaria. También se ven afectados sus hijos, que quedarán atrapados en un ciclo generacional de pobreza.
Salud sexual de la comunidad LGBT+
Las personas LGBT+ enfrentan desafíos y barreras especiales al acceder a servicios de salud sexual y reproductiva. Debido a presiones culturales y sociales, estos grupos a menudo quedan excluidos del sistema médico convencional y no pueden recibir atención y apoyo adecuados, lo que erosiona aún más su salud y sus derechos.
“Los derechos e intereses de la comunidad LGBT+ deben respetarse plenamente para proteger su salud y supervivencia”.
Conclusión
En este contexto, debemos hacer más esfuerzos para garantizar que se satisfagan las necesidades de salud sexual y reproductiva de todos, ya sea en educación, atención médica o asignación de recursos. Todos los sectores de la sociedad deben trabajar juntos para crear conciencia sobre la salud sexual y reproductiva. ¿Cree que puede obtener suficiente apoyo e información sobre salud sexual y reproductiva para cumplir con los estándares de la OMS?
