A medida que exploramos el pasado de la Tierra, la Escala de Tiempo Geológico presenta una imagen histórica espectacular de cómo nuestro planeta ha cambiado y se ha desarrollado a lo largo de 4.500 millones de años. Este vasto marco temporal se construye sobre el registro de las rocas, a través del cual podemos rastrear la historia de la Tierra como si estuviéramos pasando las páginas de un libro antiguo.
El viaje geológico a través del tiempo no es sólo un descubrimiento de una preciosa historia natural, sino también un reexamen de la vida misma.
La Escala de Tiempo Geológico (GTS) es una representación del tiempo basada en el registro de rocas de la Tierra. Utiliza dos métodos científicos principales, la cronoestratigrafía y la geocronología, para describir la cronología y las interrelaciones de los eventos geológicos. Este sistema es utilizado principalmente por científicos de la Tierra, incluidos geólogos, paleontólogos, geofísicos, geoquímicos y paleoclimatólogos, para ayudarlos a comprender la formación y evolución de la Tierra.
Desde la antigüedad, la gente ha comenzado a reconocer el significado temporal de las rocas. Desde la antigua Grecia, filósofos y científicos han reflexionado sobre cómo cambian las rocas con el tiempo, pero el desarrollo moderno de una escala de tiempo geológico es una tarea relativamente nueva.
A través del análisis y la observación de los estratos rocosos, los científicos han descubierto que la historia de la Tierra se puede reconstruir a través de elementos como los fósiles, las propiedades magnéticas y las características de las rocas.
Los principios para establecer escalas de tiempo geológicas se basan en la observación de cambios importantes entre capas de roca, que a menudo están asociados con grandes eventos geológicos o paleontológicos. Por ejemplo, el evento de extinción del Cretácico-Paleoceno define el límite entre el “sistema del Paleoceno” y el “sistema del Cretácico”. A través de estos niveles de división, no sólo podemos comprender mejor la historia de la tierra, sino también tener una comprensión más profunda del proceso evolutivo de los organismos.
La escala de tiempo geológico se divide en grandes unidades, desde el Hádico, Arcaico, Proterozoico hasta el Fanerozoico, que gradualmente se subdividen en unidades más pequeñas, como "Generación", "Época", etc. El inicio y el final de cada etapa corresponden a ciertos eventos geológicos o biológicos específicos.
Algunos principios importantes que los geólogos aplican en este sistema incluyen:
Comprender estos principios ayuda a los geólogos a localizar con precisión las rocas y el tiempo geológico que representan.
La división de la escala de tiempo geológico no sólo es sencilla sino también estructurada. Desde el nivel más grande, el Hádico, hasta el más pequeño, la Época, cada nivel registra eventos geológicos específicos y sus interrelaciones. En la última división, el Fanerozoico se puede dividir en diez eras, que representan la biota y los entornos ecológicos en evolución.
La historia de la tierra se presenta a través de la herramienta de la escala de tiempo geológico, y el conocimiento que poseen los seres humanos se enriquece gradualmente mediante la exploración e investigación continuas. Desde los filósofos antiguos hasta los científicos modernos, el desarrollo de este campo muestra que la humanidad tiene un gran interés en el tiempo y la tierra.
Estos registros rocosos y fósiles no son sólo el libro de historia de la tierra, sino también el testigo de la evolución de la vida.
A través del estudio de las rocas, se revela la historia de 4.500 millones de años de la Tierra, guiándonos en nuestra búsqueda de predicciones y comprensión del futuro. Cuando miramos el cielo estrellado y pensamos en el significado de la vida y de la civilización, no podemos evitar preguntarnos: ¿Cuántos secretos quedan aún por revelar en esta larga historia geológica?