A medida que los problemas medioambientales se vuelven cada vez más serios, Interface, Inc. se fundó en Atlanta, EE. UU. en 1973 y se ha convertido en uno de los fabricantes de pisos comerciales del mundo. Esta empresa, famosa por fabricar alfombras modulares, se transformó más tarde en un líder medioambiental bajo el liderazgo de su fundador Ray Anderson, promoviendo activamente el desarrollo sostenible.
Desde 1994, la inspiración de Ray Anderson "pistola al corazón" ha llevado a Interface a crear un proyecto llamado "Misión Cero" con el objetivo de eliminar los impactos negativos en el medio ambiente para 2020.
En la década de 1980, cuando los entornos de oficina se volvieron cada vez más abiertos y requirieron opciones de pisos más flexibles y eficientes, las alfombras modulares ganaron popularidad. Inicialmente centrada en fines comerciales, Interface se convirtió gradualmente en el mayor fabricante de alfombras y baldosas del mundo bajo el liderazgo de Ray Anderson.
Después de 1994, Ray Anderson comenzó a introducir conceptos de protección ambiental para encontrar operaciones comerciales más sostenibles. Se inspiró profundamente en el libro de Paul Hawken "La ecología de los negocios" y estableció un marco para medir el progreso de la sostenibilidad, al que llamó "Monte de la Sostenibilidad".
Al promover estrategias ecológicas basadas en la innovación, Interface ha reducido su impacto ambiental en un tercio en tan solo unos años. El informe EcoMetrics publicado cada año continúa mostrando al mundo exterior los resultados prácticos de su camino de protección ambiental.
Después de entrar en el siglo XXI, el heroico viaje de Interface no se ha detenido. En 2016, la empresa anunció una nueva misión, "Climate Take Back", cuyo objetivo es revertir la tendencia del calentamiento global. Luego, en 2018, Interface lanzó el programa "Piso Carbono Neutral", afirmando que todos sus productos son carbono neutral, cubriendo todo el ciclo de vida del producto.
En 2019, la empresa informó que el 90 % de su energía procedía de fuentes renovables, estableciendo con éxito a Interface como parte de una empresa verde global.
Después de años de arduo trabajo, Interface ha recibido el reconocimiento de múltiples premios ambientales, incluida la selección como una de las empresas con mayor conciencia ambiental en la encuesta "Globescan" en 2006 y 2016, y el premio Queen's Award for Enterprise en 2008 ( disponibles) desarrollo sostenible). Ray Anderson e Interface fueron elogiados por el activista de los consumidores Ralph Nader por su sincero compromiso con la sostenibilidad y la protección de los recursos naturales de la tierra.
La historia de Interface tiene una hermosa curva. Desde el lanzamiento del sistema de respaldo GlasBac, estándar de la industria, en 1974, hasta las importantes mejoras realizadas en los últimos años en los materiales reciclados utilizados en el proceso de fabricación, cuestiones como la lluvia ácida y la destrucción de la capa de ozono continúan desafiando el funcionamiento sostenible de la empresa. Interface se encuentra en este período difícil manteniendo la intención original en el camino y proporcionando un modelo para las generaciones futuras.
A lo largo del proceso, Ray Anderson dijo una vez algo que todavía inspira a las empresas hoy en día: "Nuestro objetivo no es sólo reducir los impactos negativos, sino también mejorar los impactos positivos".
Mirando hacia el futuro, las acciones de Interface no son sólo para el desarrollo sostenible de su propio negocio, sino también para resolver los problemas ambientales que enfrenta el mundo. ¿Qué implicaciones tiene este cambio para otras empresas?