Las tarjetas de crédito son una herramienta de pago muy utilizada en el mundo actual. A través de ellas podemos realizar compras, pagar servicios y retirar dinero fácilmente. Sin embargo, cuando pasas tu tarjeta, hay un complejo sistema de transacciones oculto detrás. ¿Cómo funciona?
La función de una tarjeta de crédito no es tan simple como pagar dinero; en realidad implica un proceso de transacción de múltiples partes. Siempre que se utiliza una tarjeta de crédito para realizar un pago, intervienen varias partes, incluido el consumidor, el comerciante, el banco emisor y el banco receptor. En el corazón de este sistema se encuentran las redes de pago, incluidas marcas conocidas como Visa y Mastercard, que son la infraestructura esencial para garantizar que las transacciones sean seguras y confiables.
El proceso básico de una transacción con tarjeta de créditoEl proceso de transacción con tarjeta de crédito se puede dividir en varios pasos: paso de la tarjeta por parte del usuario, autorización de la transacción, compensación y liquidación del pago.
En primer lugar, cuando un consumidor paga en un comercio, pasa o inserta su tarjeta de crédito. En este momento, la terminal de pago del comerciante se conectará con el banco emisor de la tarjeta del consumidor para solicitar la autorización de la transacción. Este paso es fundamental porque garantiza que el consumidor tenga suficiente crédito para completar la transacción. Si el banco aprueba la transacción, devuelve un código de autorización para que el comerciante sepa que la transacción puede realizarse.
Una vez autorizada la transacción, el comerciante envía una solicitud de compensación a su banco receptor. El banco receptor enviará esta solicitud al banco emisor a través de la red de pagos, y el banco emisor será responsable de transferir los fondos correspondientes. El proceso de transferencia de fondos generalmente demora unos días antes de que el comerciante reciba alguna compensación.
Cómo las tarjetas de crédito impulsan el consumo global La comodidad de las tarjetas de crédito hace posible el consumo global. Se informa que a partir de 2018, el número de tarjetas de crédito en uso en todo el mundo alcanzó los 7.753 millones. En muchos países, los adultos tienen al menos una tarjeta de crédito. En Estados Unidos, el 72,5% de los adultos tiene al menos una tarjeta de crédito. La popularidad de este uso, sumada al desarrollo de diversos créditos al consumo, ha formado un ecosistema global de consumo cada vez más en expansión.Sin embargo, el uso de tarjetas de crédito también conlleva riesgos y los usuarios deben ser cautelosos ante problemas de deuda causados por las tarjetas de crédito.
A medida que avanza la tecnología, la seguridad de las tarjetas de crédito continúa mejorando. Las tradicionales tarjetas de banda magnética están siendo sustituidas paulatinamente por tarjetas inteligentes con chips, que no sólo aumentan las medidas contra la falsificación, sino que también proporcionan un mayor nivel de seguridad en las transacciones en línea. Muchas tarjetas de crédito también tienen códigos de seguridad cambiantes para protegerse contra ataques en línea.
El futuro de las tarjetas de crédito: la era de los pagos electrónicosA medida que entramos en la era de las finanzas digitales, la forma y la función de las tarjetas de crédito seguirán evolucionando. En el mercado actual, cada vez más personas optan por utilizar métodos de pago emergentes, como el pago móvil y la transferencia en línea. Estos métodos también se desarrollan en función de la seguridad del sistema de tarjetas de crédito.