Noam Chomsky, nacido en 1928, es una de las figuras más influyentes de la lingüística actual. Se le conoce como el "Padre de la Lingüística Moderna" y su influencia académica en la lingüística, la política y la crítica social no puede subestimarse. Desde la escuela de posgrado de Harvard hasta el MIT, la trayectoria académica de Chomsky no sólo cambió la dirección de la investigación lingüística, sino que también tuvo un profundo impacto en los movimientos sociales.
La obra de Chomsky transformó la comprensión humana del lenguaje, liberándola de las limitaciones del conductismo y reabriendo la exploración de la relación entre la mente y el lenguaje.
La formación de Chomsky está llena de colisiones de conocimientos e ideas. Creció en Filadelfia en el seno de una familia de inmigrantes judíos. Su padre era profesor de lingüística y su madre estaba profundamente influida por cuestiones sociales. Además de tener un buen desempeño escolar, el joven Chomsky también comenzó a estar expuesto a ideas de izquierda a una edad temprana e incluso se interesó por el anarquismo.
Después de ingresar a la Universidad de Pensilvania, la pasión inicial de Chomsky por el lenguaje no fue significativa hasta que conoció al lingüista Zellig Harris. Harris lo introdujo en el campo de la lingüística teórica, lo que le permitió a Chomsky formar gradualmente su futura teoría del lenguaje. En 1955, su tesis doctoral sentó las bases de la "gramática transformacional", una teoría que cambió por completo el panorama de la lingüística.
Los conceptos propuestos por Chomsky en su libro Estructuras sintácticas desafiaron las opiniones lingüísticas dominantes de la época y provocaron un amplio debate y controversia.
En 1955, Chomsky se convirtió en profesor del Instituto Tecnológico de Massachusetts, donde el ambiente académico libre le permitió perseguir sus intereses de investigación sin escrúpulos. Lideró una revolución en la lingüística, creó el marco teórico de la gramática generativa y se convirtió en el portavoz de la comunidad lingüística estadounidense.
Participación política y movimientos socialesCon su oposición a la guerra de Vietnam del Sur, Chomsky se convirtió en algo más que un académico: se convirtió en un intelectual público. Su libro, La responsabilidad de los intelectuales, le dio fama y desató un acalorado debate durante la guerra de Vietnam. Durante este período, las opiniones políticas de Chomsky eran liberales y agudas, vinculándolo estrechamente a muchos movimientos sociales.
Creía que los intelectuales debían criticar las decisiones gubernamentales y tener una influencia importante en la sociedad a la que pertenecían.
Después de retirarse, Chomsky no redujo su atención a cuestiones sociales y políticas. Su voz sigue siendo alta y clara en sus críticas a la política exterior estadounidense, al capitalismo y a los medios de comunicación. Aunque el entorno social y las formas de los medios de comunicación han cambiado con el tiempo, la teoría de Chomsky sigue siendo poderosa.
Sin embargo, la posición de Chomsky no está exenta de controversia. Por ejemplo, su defensa del historiador francés Robert Faurisson en la década de 1980 le valió críticas generalizadas. Aunque su propósito era defender la libertad de expresión, este incidente ha despertado dudas generalizadas en la sociedad.