El 20 de abril de 1999, ocurrió un tiroteo en la escuela secundaria de Columbine, en Colorado, que conmocionó a todo el país. El ataque fue perpetrado por dos estudiantes de secundaria, Eric Harris y Dylan Klebold, quienes mataron a 12 estudiantes y un profesor, y a otras 24 personas. Heridos. La sensación mediática y el pánico moral causados por el incidente hicieron que “Columbine” fuera sinónimo de tiroteos escolares. La historia de esta pareja de amigos va de una vida adolescente normal a un camino trágico. Es interesante ver cómo su plan se fue desarrollando poco a poco.
Primeros años de vidaHarris y Klebold crecieron en entornos muy diferentes. Harris nació en Kansas en 1981 de padres que se mudaban con frecuencia debido al trabajo de su padre en la Fuerza Aérea. Parecía estar disfrutando de su tiempo en Michigan, jugando béisbol en ligas menores y teniendo un círculo social decente en la escuela. Klebold nació en Colorado ese mismo año y tuvo una infancia relativamente normal. Cuando se conocieron en séptimo grado, su amistad se profundizó gradualmente y se convirtieron en buenos amigos inseparables.
Según sus diarios y vídeos, Harris y Klebold comenzaron a planificar el ataque en mayo de 1998, casi un año antes. ¿Cómo fue evolucionando gradualmente este proceso de preparación hasta llegar al plan final?
En un análisis de personalidad de Harris y Klebold, la policía dijo que Harris tenía rasgos psicopáticos, mostrando narcisismo, agresión ilimitada y falta de empatía. Klebold, por el contrario, era visto como una persona enojada y deprimida. A pesar de estas etiquetas, ninguno de los dos hombres parecía haber recibido un diagnóstico formal de enfermedad mental antes del ataque.
Muchos medios de comunicación han analizado múltiples factores, entre ellos el acoso escolar, las relaciones interpersonales, las enfermedades mentales y la discriminación racial, como motivaciones de los ataques. Sin embargo, aún no está claro qué factor jugó un papel clave. Hoy en día, Harris y Klebold son íconos de la cultura pop. Muchos futuros atacantes incluso los utilizaron como inspiración, si no utilizando sus acciones para expresar sentimientos, lo que hace imposible no pensar en los cambios en la mentalidad de esta sociedad.
"Su historia no es sólo una tragedia, sino también una profunda reflexión sobre la salud mental de la sociedad contemporánea".
A medida que sus vidas se volvían cada vez más aisladas, su amistad empezó a deteriorarse. Según la madre de Klebold, la ira de Harris y la personalidad autodestructiva de Klebold se entrelazaron, lo que finalmente condujo a una amistad desesperada. Sin embargo, Harris también tiene muchos amigos en su círculo social, lo que añade mucha complejidad a sus motivos. Las emociones reflejadas en sus diarios y vídeos hacen que la gente sienta su desesperación hacia el mundo.
El incidente de Columbine ha dejado una marca indeleble en la historia. Con el paso del tiempo, la sociedad se ha preocupado más por la salud mental, las relaciones familiares y la cultura juvenil. Los repetidos tiroteos en las escuelas han hecho que la gente reconsidere cómo evitar repetir los mismos errores.
¿Cuánta importancia tiene esto como advertencia para la sociedad actual? ¿Cuántos "Columbine" más ocurrirán en el futuro?