El mundo se enfrenta actualmente a los desafíos de la crisis energética y el cambio climático, en los que el diseño arquitectónico juega un papel vital. La masa térmica (la capacidad de los materiales de un edificio para almacenar calor) no solo afecta el nivel de confort del edificio, sino que también puede tener un profundo impacto en el consumo de energía. El uso y la definición de este concepto sin duda requieren mayor discusión.
La masa térmica no está definida de manera consistente. La mayoría de los autores la denominan capacidad calorífica, es decir, la capacidad de un objeto para almacenar energía térmica. Pero algunos investigadores, como Christopher Reinhart del MIT, sostienen que la masa térmica debería definirse como el volumen del material multiplicado por su capacidad calorífica volumétrica. Esta diferencia en las definiciones ha llevado a que la aplicación de la masa térmica en el diseño de edificios a veces se considere una pseudociencia, lo que nos lleva a preguntarnos: ¿cómo exactamente es la masa térmica una herramienta importante para reducir el consumo de energía?
Masa térmica y capacidad calorífica en los edificiosLa utilización de la masa térmica en el diseño de edificios puede resultar en una mayor eficiencia energética y confort.
Al comprender cómo la masa térmica afecta el diseño del edificio, no podemos ignorar el papel de la capacidad térmica. La capacidad térmica se refiere a la capacidad de un objeto para almacenar energía térmica y está relacionada con la masa del material y su capacidad térmica específica. Esto se puede expresar simplemente como la capacidad calorífica igual a la masa del objeto multiplicada por la capacidad calorífica específica del material. A medida que cambia el entorno externo del edificio, la propiedad de la masa térmica le permite absorber calor durante el día y liberarlo durante la noche, lo que es particularmente importante en áreas con cambios extremos de temperatura.
Christoph Reinhart explica más detalladamente: “Si los cambios de temperatura externa diurna y nocturna son frecuentes y fluctúan alrededor de un punto de equilibrio ideal, agregar masa térmica puede aumentar la cantidad de horas de confort durante un período de tiempo”. Esto demuestra que, bajo la En circunstancias adecuadas, la masa térmica puede mejorar significativamente el confort de un entorno residencial.
La presencia de masa térmica permite que el edificio mantenga una temperatura interna estable a medida que cambia el ambiente externo.
Si bien la masa térmica tiene el potencial teórico de reducir el consumo de energía, a menudo se la cuestiona en la práctica de la construcción. Por ejemplo, muchos arquitectos no calculan la capacidad térmica durante el proceso de diseño. Los códigos de construcción nacionales de Estados Unidos y Canadá generalmente basan la configuración de los equipos en el Manual J de la Asociación de Contratistas de Calefacción, Ventilación y Aire Acondicionado, que no considera adecuadamente los efectos de la capacidad térmica en la comodidad.
El Manual J se basa principalmente en mediciones detalladas, incluidas las dimensiones, la construcción y el aislamiento del edificio, por lo que el equipo está dimensionado para mantener el confort en temperaturas extremas sin considerar la capacidad térmica suficiente para soportar el proceso.Los equipos que no tienen en cuenta la capacidad térmica no podrán gestionar eficazmente cambios breves de temperatura.
La tecnología de masa térmica tiene un gran potencial para promover un diseño de edificios más sostenible. A medida que avanza la tecnología, cada vez más diseñadores y arquitectos entienden la masa térmica como un factor clave para mejorar la eficiencia energética y el confort humano. La masa térmica de los edificios no sólo mantiene los interiores frescos durante los calurosos meses de verano, sino que también proporciona calidez adicional durante los fríos meses de invierno, lo que demuestra su continua importancia para afrontar los desafíos energéticos actuales y futuros.
Sin embargo, el diseño de edificios con la cantidad adecuada de masa térmica aún requiere mayor atención e inversión. Los edificios del futuro deben integrar los principios de masa térmica para crear entornos más eficientes energéticamente con el fin de abordar el aumento continuo del consumo energético en el mundo. Este no es sólo un desafío para el diseño y la arquitectura, sino también una tarea importante para toda la sociedad en la búsqueda del desarrollo sostenible.
Si podemos aprovechar al máximo las propiedades de la masa térmica para mejorar el diseño de los edificios, ¿cómo cambiará el consumo futuro de energía?