En el desafiante y cambiante mundo actual, a menudo pasamos por alto el papel que desempeñan los seres no humanos en las cuestiones de justicia social. El auge de los estudios críticos con animales (CAS) es una respuesta importante a este problema. Este campo académico combina la justicia ambiental y social, enfatiza la necesidad de interconexión entre los humanos y otros seres vivos y pide movimientos de justicia entre especies para transformar las estructuras sociales.
En esencia, los estudios críticos con animales exploran las conexiones entre el especismo y otras formas de opresión.
Los estudios críticos con animales comenzaron en 2001 mediante el establecimiento del Centro para Asuntos de Liberación Animal, cuyo objetivo es combinar la investigación académica y las actividades políticas. Posteriormente pasó a llamarse Instituto de Estudios Críticos con Animales (ICAS) y gradualmente estableció una red global. En este movimiento, los académicos no sólo se centran en los derechos de los animales, sino que también profundizan en las cuestiones de justicia social relacionadas con ellos, incluida la discriminación racial, el sexismo y otras formas de desigualdad social.
La historia de los estudios críticos con animales se remonta a las décadas de 1960 y 1970, cuando las cuestiones de protección ambiental y derechos de los animales entraron por primera vez en el debate académico. También surgieron uno tras otro los primeros movimientos de liberación animal, como las Bandas de la Misericordia y el Frente de Liberación Animal. Con el avance de los tiempos, los estudios críticos con animales formaron gradualmente su propia estructura y actividades académicas.
La preocupación académica no se limita al bienestar de los animales, sino que también involucra a otros grupos oprimidos de manera más amplia.
Desde su creación, ICAS ha publicado continuamente investigaciones relevantes y organizado diversas conferencias y actividades, como la Conferencia anual de Filosofía y Política de Liberación Animal. Además, la institución publica una variedad de revistas académicas que brindan una plataforma para la investigación crítica con animales.
La operación de estudios críticos en animales se guía por los siguientes diez principios:
Los estudios críticos en animales son significativamente diferentes de los estudios tradicionales en animales. El primero enfatiza la participación política y la acción directa y desafía ciertas ideas de la academia tradicional. Los defensores de los estudios críticos con animales a menudo argumentan que, si bien contribuyen a la complejidad de las relaciones entre humanos y animales, carecen de un compromiso ético profundo y están desconectados de las cuestiones prácticas.
El objetivo principal de los estudios críticos con animales es romper el silencio sobre la situación de los animales en la sociedad.
Además, los estudios críticos con animales enfatizan la intersección del especismo con otras cuestiones de justicia social, lo cual es importante en la sociedad actual. En el contexto de la globalización, este tipo de investigaciones no sólo avanzan en la comprensión de la vida no humana, sino que también nos revelan las desigualdades en muchas estructuras sociales.
A medida que los movimientos por la justicia social se expanden, los estudios críticos con animales pueden convertirse en una nueva frontera para explorar las relaciones entre humanos y no humanos. Este movimiento ofrece una perspectiva más holística, desafía los patrones de pensamiento tradicionales y promueve la solidaridad entre especies y un cambio social más profundo. Entonces nos preguntamos: ¿De qué otra manera podemos hacer que se escuchen las voces de toda la vida en esta lucha contra todas las formas de opresión?