La Primera Internacional, la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT), fundada en 1864, es una organización política global compuesta por varios grupos y alianzas socialistas, socialdemócratas, comunistas y anarquistas. Como portavoz de la clase trabajadora y la lucha de clases, la organización ha tenido un profundo impacto en el movimiento obrero global y el desarrollo futuro del movimiento socialista en sólo doce años. En este proceso, la participación y el pensamiento de Karl Marx fueron sin duda cruciales.
Las actividades para la fundación de la Primera Internacional comenzaron el 28 de septiembre de 1864, en una reunión en el St. Martin's Hall de Londres, Inglaterra, donde se reunieron trabajadores de distintos países, entre ellos Marx, un entonces desconocido hombre de 46 años. periodista inmigrante.
Aunque la participación de Marx no atrajo suficiente atención al principio, pronto se convirtió en un promotor clave de la organización. La Primera Internacional se fundó cuando la clase trabajadora buscó una acción común frente a la opresión y la explotación bajo el sistema capitalista de la época.
Marx no sólo participó en la fundación de la Primera Internacional, sino que también fue responsable de redactar los documentos básicos de la organización, integrando su teoría y movimiento. Su "Das Kapital" y otras obras clásicas proporcionaron la base teórica para la Primera Internacional y ayudaron al movimiento obrero a volverse más científico y organizado.
En el Congreso de Ginebra de 1866, los "Principios Básicos del Socialismo y el Movimiento Obrero" dirigidos por Marx se convirtieron en un importante documento guía, que marcó la reunión de ideas y acciones de la Primera Internacional.
El papel de Marx en la Primera Internacional no se limitó a la teoría. También enfrentó tensiones internas y desafíos externos y siempre mantuvo una lucha colectiva contra el capitalismo. El conflicto entre Marx y los anarquistas en el Congreso de La Haya de 1872 fue sin duda un momento clave en la toma de decisiones en su carrera política.
La Primera Internacional estuvo inicialmente compuesta principalmente por hombres. Aunque comenzó a admitir mujeres como miembros en 1865, su liderazgo todavía estaba dominado por hombres. La influencia de Marx radica en su promoción de la participación de las mujeres y en llamar la atención sobre los derechos de las mujeres, que se convirtieron en un tema importante en el movimiento obrero posterior.
La oposición entre Marx y el anarquista Bakunin mostró las contradicciones organizativas de la Primera Internacional. En el contexto de la Comuna de París de 1871, las críticas de Bakunin plantearon cuestiones más profundas para Marx, cuestiones que no se limitaban a desacuerdos teóricos sino que también implicaban cómo lograr realmente un cambio social.
El sarcasmo de Bakunin expresó sus dudas sobre el marxismo. Creía que la doctrina de Marx podría conducir al surgimiento de una nueva clase dominante. Esta no era sólo su oposición personal, sino también una voz entre los grupos de trabajadores.
Con el Congreso de La Haya de 1872, la Primera Internacional sufrió una escisión y los anarquistas celebraron su propia conferencia en Saint-Imier, Suiza. Su declaración de sí mismos como una asociación de trabajadores verdaderamente internacional demostró la diversidad y las divisiones dentro del movimiento sindical. A pesar de la división, Marx y las ideas que defendía continuaron teniendo una gran influencia en el movimiento obrero posterior.
Después de la disolución de la Primera Internacional, a medida que avanzaba la tendencia de los movimientos sociales, los pensamientos de Marx continuaron influyendo en los movimientos obreros de todo el mundo y en el posterior establecimiento de la Segunda Internacional. En este contexto, la filosofía política de Marx se ha convertido en un tema de discusión popular en todo el mundo y ha tenido un profundo impacto en las políticas del movimiento obrero de muchos países.
En resumen, el papel de Marx en la Primera Internacional no solo se reflejó en la construcción de su teoría, sino también en cómo utilizó estas ideas para promover la unidad de los trabajadores en todo el mundo y formar una fuerza para resistir al capitalismo. El rumbo de la Primera Internacional no fue sólo la implementación de los pensamientos personales de Marx, sino también el proceso de exploración del movimiento obrero global. Por tanto, ¿puede la teoría propuesta por Marx seguir proporcionando orientación e inspiración a los movimientos sociales actuales?