En el vasto campo de la física, hay fenómenos que desafían nuestra comprensión de las leyes de la naturaleza. El oscilador de van der Pol es uno de estos fenómenos. Es un sistema oscilatorio no conservador con amortiguación no lineal que puede exhibir comportamientos de movimiento maravillosos bajo ciertas condiciones, lo que ha desencadenado debates en profundidad sobre sus características en la comunidad científica. En las décadas siguientes, los osciladores de Van der Pol no sólo se convirtieron en objeto de investigación en física, sino que también fueron ampliamente utilizados en biología y otros campos científicos.
Según una investigación del físico holandés Balthasar van der Poel, cuando aparece un tubo de vacío en un circuito, se puede observar un fenómeno de oscilación estable. Este fenómeno es la llamada oscilación relajada.
La teoría inicial del oscilador de van der Poel fue propuesta por Balthasar van der Poel en la década de 1920, mientras trabajaba para la empresa Philips. Como resultado de su trabajo en circuitos de tubos de vacío, van der Poel notó el ruido aleatorio que estos circuitos producían al acercarse a ambientes extremos, que finalmente se identificó como el resultado de un caos determinista. En 1927, van der Poel y su colega van Mark informaron de este descubrimiento en la revista Nature, que no sólo amplió el campo de aplicación de los osciladores, sino que también tuvo un profundo impacto en el desarrollo de la física.
El movimiento del oscilador de van der Pol sigue la siguiente ecuación diferencial de segundo orden:
Aquí, x representa la coordenada de posición y μ es un parámetro que indica la no linealidad y la fuerza de amortiguación. La característica de este sistema es que cuando μ es mayor que cero, todas las condiciones iniciales convergen a un ciclo límite globalmente único. Esto significa que independientemente del estado inicial, el sistema pasará a un estado estable.
En el sistema oscilador de van der Pol, cuando μ es mayor que cero, hay un ciclo límite estable, lo que hace que el comportamiento de este sistema exhiba características complejas y cíclicas.
Las aplicaciones de la ecuación de van der Pol no se limitan a la física. En biología, Fitzhugh y Nagumo ampliaron esta ecuación y la utilizaron como modelo de potenciales de acción neuronales. En geología, los modelos de van der Pol se utilizan para simular la interacción entre dos losas de roca en una falla sísmica.
Esta ecuación se ha utilizado incluso en fisiología del sonido para estudiar las vibraciones de las cuerdas vocales, lo que demuestra aún más su influencia generalizada en múltiples campos científicos.
Con el avance de la ciencia y la tecnología, los osciladores de Van der Pol no se limitan a los límites de la física clásica y se ha comenzado a proponer el concepto de osciladores cuánticos de Van der Pol. Los investigadores utilizaron la ecuación de Lindblad para estudiar la dinámica cuántica y la sincronicidad cuántica del sistema, y este desarrollo nos muestra cómo el comportamiento no lineal en el mundo cuántico afecta los fenómenos a macroescala.
Aunque el modelado del oscilador cuántico de Van der Pol es más complejo que su versión clásica, los conocimientos que aporta proporcionan una comprensión más profunda del proceso de cuantificación de sistemas no lineales.
Con la profundización de la investigación sobre los osciladores de Van der Pol, los científicos aún enfrentan muchos desafíos desconocidos. Por ejemplo, todavía quedan muchas preguntas sin respuesta sobre cómo se comporta este sistema en regímenes fuertemente no lineales, y todavía se necesitan nuevas formas de sondear y analizar su dinámica interna.
Mientras pensamos en cómo los osciladores de Van der Pol impactan la física contemporánea y sus aplicaciones, no podemos evitar preguntarnos: ¿Cómo estos sistemas no conservadores cambiarán nuestra comprensión de las leyes fundamentales del universo en futuras investigaciones?