Bajo la intensa actividad volcánica se formó el espectacular espectáculo que vemos hoy. No sólo es un fenómeno asombroso, sino que esconde muchos misterios científicos. En primer lugar, la gente suele confundir la lava con el magma, pero en realidad son fundamentalmente diferentes. Este artículo profundizará en la naturaleza de ambos y revelará los secretos que encuentran los volcanes.
La lava es roca líquida que se forma cuando el magma alcanza la superficie; el magma es el material fundido debajo de la Tierra que puede contener cristales y burbujas de gas.
El magma es el precursor de las rocas ígneas en el interior de la Tierra, y proviene principalmente de la fusión del manto superior y la corteza. Durante su formación, el magma puede mezclarse con gases como vapor de agua o dióxido de carbono, así como con cristales en suspensión. A medida que el magma asciende, la presión circundante disminuye gradualmente y estos gases comienzan a liberarse, provocando que las propiedades del magma cambien.
La concentración, temperatura y presencia de gases en el magma afectan su fluidez y viscosidad; por lo tanto, las propiedades del magma son complejas y variadas.
Dependiendo de su composición, el magma se puede dividir en varias categorías, principalmente magma rico en sílice, magma básico, magma ultrabásico y magma alcalino.
Por el contrario, el magma básico es relativamente fluido, lo que hace que entre en erupción en una forma más baja y se extienda a una distancia mayor, formando un enorme volcán en escudo.
Cuando el magma sube a la superficie y se enfría, forma la roca que conocemos como lava. La fluidez de la lava depende generalmente de su composición, por lo que vemos diferencias significativas entre los distintos tipos de volcanes.
El flujo de lava se puede dividir en lava masiva y lava ondulada. Esta última fluye fuera del cráter con mucha facilidad, formando un terreno único.
La temperatura de la lava suele oscilar entre 700 y 1.400 grados centígrados, pero algunos tipos raros, como el magma carbenoide, pueden llegar a alcanzar los 490 grados centígrados.
El principal componente gaseoso del magma es el vapor de agua, seguido por el dióxido de carbono y el sulfuro de hidrógeno. El contenido de estos gases tiene un impacto significativo en las propiedades del magma y en su forma de erupción.
Cómo se mueve el magmaCuando la presión baja, los gases en el magma comienzan a formar burbujas, que eventualmente hacen que el magma sea más liviano y ayudan a que el volcán entre en erupción.
El movimiento del magma se ve afectado por el entorno circundante, incluida la estructura, la temperatura, la presión y otros factores de la corteza terrestre. A medida que el magma se mueve hacia arriba, forma lo que se llama una cámara de magma, un área donde el magma se almacena temporalmente antes de ser liberado a la superficie a través de erupciones volcánicas.
Los científicos han estudiado el magma a través de muchas expediciones y consideraciones, incluido el uso de técnicas como la perforación geotérmica para observar el magma directamente. Nuestra comprensión del magma se ha mejorado aún más gracias a su descubrimiento directo durante ciertos proyectos de perforación en Islandia y Hawai.
ResumenEste descubrimiento es de gran importancia para el estudio de las actividades volcánicas y sus riesgos potenciales, especialmente para comprender el movimiento del magma y el comportamiento de las erupciones.
Cuando contemplamos la majestuosidad y el esplendor de los volcanes, en realidad estamos presenciando una evidencia de la dinámica del interior de la Tierra. Las diferencias entre el magma y la lava reflejan las complejas actividades geológicas que ocurren en las profundidades de la Tierra. Este conocimiento no sólo ayuda a la investigación científica, sino que también es crucial para la predicción futura de volcanes y la prevención de desastres. Entonces, ¿pueden estas actividades volcánicas revelar más secretos sobre el interior de la Tierra?