El procesamiento paralelo es una capacidad importante del cerebro humano que permite procesar simultáneamente estímulos de diversa calidad. Esta capacidad es particularmente evidente en el sistema visual, donde el cerebro separa lo que vemos en cuatro componentes: color, movimiento, forma y profundidad, y luego compara esta información con los recuerdos almacenados para ayudarnos a reconocer lo que estamos viendo. Al final, esta información se sintetiza en una visión comprensible, un proceso continuo y sin fisuras. Por ejemplo, cuando una persona se sitúa entre dos grupos de personas que mantienen diferentes conversaciones, puede capturar información parcial de ambas conversaciones al mismo tiempo.
Procesamiento paralelo vs. procesamiento secuencial El procesamiento en serie, a diferencia del procesamiento paralelo, implica procesar la información de a una en secuencia, lo que significa que los tiempos de procesamiento no se superponen. La diferencia entre estos dos estilos de procesamiento es más evidente cuando se apunta a los estímulos visuales y se procesan. En el procesamiento secuencial, los elementos se buscan secuencialmente para encontrar el objetivo y, cuando se encuentra el objetivo, el proceso de búsqueda finaliza. Por el contrario, si no se encontraba el objetivo, la búsqueda continuaba hasta terminar, lo que daba como resultado una menor precisión y un mayor tiempo cuando se presentaban más objetos.El concepto de procesamiento paralelo describe cómo el cerebro asigna y utiliza sus recursos de manera eficiente.
En el procesamiento paralelo, todos los objetos se procesan al mismo tiempo, por lo que incluso si el tamaño mostrado varía, el tiempo para completarlo puede ser similar.
En 1990, el psicólogo estadounidense David Rumelhart propuso el modelo de procesamiento distribuido paralelo (PDP) en un esfuerzo por estudiar los procesos neuronales a través de simulación por computadora. Según Rumelhart, el modelo PDP considera el procesamiento de la información como el resultado de interacciones entre las llamadas unidades, que pueden ser facilitadoras o inhibidoras.
Estos modelos a menudo se inspiran en la estructura del sistema nervioso e imitan la organización del sistema nervioso de los organismos vivos. Suponen que la información se representa en el cerebro como patrones de activación y que el procesamiento de la información se realiza utilizando unidades similares a neuronas que interactúan a través de conexiones similares a sinapsis. El nivel de activación de cada unidad se actualiza en función de la intensidad de la conexión y el nivel de activación de otras unidades.
El modelo PDP incluye ocho aspectos principales:
Estos elementos trabajan juntos para permitir que el cerebro procese la información de manera más eficiente, pero también tienen sus limitaciones.
Conclusión El procesamiento paralelo no sólo nos permite recibir y comprender de manera eficiente los estímulos que nos rodean, sino que también implica cómo generamos respuestas cognitivas rápidas. Sin embargo, aún así, todavía hay situaciones en las que el cerebro no puede procesar completamente en paralelo. En este contexto, resulta especialmente importante comprender cómo nuestra atención afecta este proceso. Entonces, ¿cómo nos ayudará la investigación futura a obtener una comprensión más profunda de las capacidades de procesamiento paralelo del cerebro y sus posibles aplicaciones?Las principales limitaciones del procesamiento paralelo incluyen límites de capacidad cerebral, distracciones momentáneas y limitaciones de procesamiento al realizar tareas complejas.