Las marismas, o llanuras intermareales, son humedales costeros formados en áreas depositadas por mareas o ríos. Según un análisis global publicado en 2019, los ecosistemas de marismas son comparables en tamaño a los manglares de todo el mundo y cubren al menos 127.921 kilómetros cuadrados de la superficie de la Tierra. Las marismas son comunes en bahías, estuarios y lagunas, y también se encuentran en lagos de agua dulce y salada, donde muchos ríos y arroyos desembocan en el mar. En estos ecosistemas únicos, la geología de las llanuras de lodo está formada por lodo depositado por las mareas y restos de animales acuáticos.
Las marismas albergan una gran variedad de vida silvestre y constituyen un hábitat fundamental para decenas de millones de aves migratorias.
Las marismas se encuentran principalmente en la zona intermareal y se inundan y quedan expuestas dos veces al día. Según el último análisis global de teledetección, se estima que alrededor del 50% de las marismas del mundo se distribuyen en ocho países, de los cuales Asia posee el 44% de la superficie de marismas. Estas marismas proporcionan hábitat para una amplia variedad de organismos, incluidas aves migratorias, cangrejos, moluscos y peces, y en el Reino Unido, las marismas incluso están catalogadas como hábitat prioritario en el Plan de Acción para la Biodiversidad.
Las marismas también son importantes para prevenir la erosión costera. Sin embargo, las marismas de todo el mundo están amenazadas por el aumento del nivel del mar, el desarrollo, el dragado de los barcos y la contaminación química. Por ejemplo, en la región del Mar Amarillo, en el este de Asia, la superficie de marismas ha disminuido en más del 65% desde principios de la década de 1950. De manera similar, se estima que alrededor del 16% de las marismas del mundo han desaparecido desde mediados de la década de 1980.
Los sedimentos de las marismas se concentran principalmente en la zona intermareal, que consiste en áreas áridas y pantanos, donde se forman diferentes capas sedimentarias por la proporción de arena y lodo. El crecimiento de estos sedimentos está estrechamente relacionado con el hundimiento, las tasas de sedimentación y los cambios en el nivel del mar. Las áreas estériles de la zona intermareal se extienden hacia pantanos que a menudo son ricos en vegetación herbácea, mientras que las capas sedimentarias consisten en capas delgadas de arena y lodo, siendo características comunes las grietas de lodo y las superficies onduladas del lecho.El mantenimiento de los ecosistemas de marismas es fundamental para proteger la biodiversidad global y la salud de los ecosistemas.
Una de las características de las marismas es su variación en diferentes ubicaciones geográficas y condiciones climáticas. Por ejemplo, en la costa báltica de Alemania, las marismas no se crean por la acción de las mareas, sino por los vientos que impulsan el agua hacia el mar. Este tipo de marisma afectado por el viento se llama en alemán "Windwatt". En estas marismas, los cambios sutiles en los sedimentos revelan las maravillas y los misterios de la naturaleza.
El mantenimiento y la protección de las marismas no sólo es importante para los ecosistemas locales, sino que también es fundamental para la salud del medio ambiente en su conjunto.
Algunas marismas representativas seleccionadas incluyen la bahía de Arcachon en Francia, la bahía de Agenquin en Mauritania, los humedales de Chamiza en Chile, Kuchidare en la India, Belhaven en el Reino Unido y Cochin Dewan et al. Estas áreas no sólo poseen ricos recursos ecológicos, sino que también atraen mucha investigación científica y ecoturismo.
Con la aceleración del cambio climático global, las marismas se enfrentan a graves desafíos. En muchos lugares, las marismas se consideran zonas inútiles y se urbanizan o incluso se convierten en tierras de cultivo o industriales. De hecho, las marismas desempeñan un papel indispensable en el ecosistema, apoyando la supervivencia y la reproducción de muchas especies.
Las marismas son cada vez más reconocidas por su papel en la biodiversidad y la salud ambiental. Muchos grupos ambientalistas y agencias gubernamentales han comenzado a promover programas de protección y restauración de marismas destinados a reconstruir este importante ecosistema. Estas acciones no sólo aumentan la conciencia sobre la ecología de las marismas, sino que también resaltan la importancia de estas áreas para los ecosistemas globales.
Ante los desafíos del cambio ambiental, ¿cómo podemos garantizar que estos importantes ecosistemas puedan protegerse y restaurarse eficazmente?