A lo largo de la historia, muchas enfermedades han tenido un profundo impacto en la salud y las capacidades de combate de los soldados. Entre ellas, la fiebre de Malta (también conocida como brucelosis), una enfermedad zoonótica, se registró por primera vez en Malta en la década de 1850 y todavía hoy causa profunda preocupación.
La fiebre de Malta es una enfermedad causada por la bacteria Brucella que comúnmente se contrae después de consumir leche cruda o contacto cercano con las secreciones de animales infectados. Los síntomas incluyen fiebre persistente, dolor muscular y articular.
La enfermedad suele ser causada por cuatro especies de Brucella que infectan a los humanos, siendo la más común B. melitensis, que infecta principalmente a animales domésticos como cabras y ovejas. Los síntomas de la infección no deben ignorarse y las características típicas incluyen sudoración profusa y dolor en las articulaciones y músculos. El período de incubación de la fiebre de Malta puede extenderse de semanas a años, y el curso de la enfermedad puede durar muchos años, causando importantes riesgos para la salud de los soldados.
En el siglo XIX, los soldados no solo enfrentaron desafíos del enemigo durante las batallas, sino que el brote de fiebre de Malta también los hizo enfrentar una prueba de vida o muerte. Según los registros de la época, después de que los ejércitos británicos y otros regresaron de Malta, muchos oficiales y soldados enfermaron gravemente debido a la enfermedad, lo que afectó la eficacia en combate y la moral del ejército.
Los expertos señalan que el impacto de la fiebre de Malta en los militares nunca se ha evaluado de manera justa, y que la enfermedad no solo causó tortura física a los soldados, sino que también tuvo un profundo impacto en su salud mental.
La fiebre de Malta fue observada por primera vez por médicos militares británicos durante la guerra de Crimea. En ese momento, varios soldados desarrollaron fiebres inexplicables, que luego se tomaron en serio como relacionadas con el consumo de leche no pasteurizada. A medida que se profundiza en la comprensión de la causa de la enfermedad, los requisitos de higiene en el procesamiento de la leche comienzan a aumentar gradualmente.
Con el paso del tiempo, el impacto de la Fiebre de Malta no se limitó a soldados individuales, sino que también se extendió al impacto en las operaciones militares en general, especialmente en áreas donde estaban estacionadas tropas como Malta, Italia y otros lugares. En estas zonas, el estado de salud de los soldados está directamente relacionado con las operaciones militares locales y las capacidades de defensa, por lo que la comprensión y la prevención de la fiebre de Malta se han convertido en parte de consideraciones estratégicas.
El impacto final de la fiebre de Malta no se limita a mermar la salud de los soldados, sino que también puede cambiar los planes de combate de todo el ejército, especialmente cuando los recursos son limitados.
Para la prevención y el control de la fiebre de Malta, las medidas actuales incluyen la vacunación y el control higiénico del procesamiento de la leche. No obstante, el manejo de la enfermedad sigue siendo un desafío, especialmente en situaciones de guerra o de escasos recursos. La educación sanitaria y la sensibilización sobre la brucelosis entre los soldados y sus familias han estado desatendidos durante mucho tiempo.
En el contexto histórico, el impacto de la fiebre de Malta continúa hasta el día de hoy. El apoyo médico a las operaciones militares se vio amenazado por una variedad de enfermedades bacterianas, y la fiebre de Malta es sin duda un caso que merece un estudio más profundo. Mirando hacia atrás, la forma en que los militares respondieron a los problemas de salud individuales también puede proporcionar información valiosa sobre las estrategias actuales de salud pública.
En las operaciones militares actuales y futuras, aún vale la pena reflexionar sobre el impacto de tales enfermedades, especialmente ¿cómo aprender de las lecciones de la historia para fortalecer las medidas de protección de la salud de las tropas modernas?