El delta del Nilo, situado aguas abajo de Egipto, no sólo es uno de los deltas más grandes del mundo, sino también la cuna de civilizaciones antiguas con una larga historia. Esta tierra ha sido testigo de innumerables desarrollos y desapariciones, y guarda muchos tesoros preciosos esperando ser descubiertos. Recientemente, las expediciones de arqueólogos han descubierto innumerables misterios sin resolver en esta tierra, brindándonos la oportunidad de obtener una comprensión más profunda de la cultura y la sociedad del antiguo Egipto.
El delta del Nilo es una parte importante de la cultura y la historia de Egipto y presagia el ciclo de prosperidad y decadencia.
Las características geográficas del delta del Nilo lo convierten en una rica zona agrícola. La zona del delta de 160 kilómetros de largo y la costa de 240 kilómetros de ancho proporcionan ricos recursos naturales. Aquí hubo una vez muchos afluentes. Aunque la mayoría de ellos han desaparecido debido al control de inundaciones y al cambio de terreno, la fuente de agua del Nilo todavía alimenta la ecología de esta tierra.
Los arqueólogos se han unido para desenterrar una gran cantidad de ruinas antiguas y algunos de los descubrimientos han conmocionado al mundo académico. En 2019, el equipo arqueológico obtuvo resultados sorprendentes durante los trabajos de excavación en el antiguo sitio de Heracleion. Descubrieron antiguos templos griegos, antiguas columnas de granito y tesoros de oro y plata de la dinastía ptolemaica. Todo esto parece trasladarnos a la época próspera de hace más de dos mil años, como la Atlántida bajo el agua.
En las ruinas de Heracleion, los arqueólogos han reconstruido la faz del antiguo Egipto y han revelado un mundo perdido.
Además, en otras zonas del delta del Nilo se han encontrado yacimientos de diferentes épocas. En enero de 2019, los arqueólogos descubrieron tumbas del Segundo Período Medieval durante las excavaciones en el área de Kom Al-Khelgan. Estas tumbas contenían varios artefactos enterrados por los antiguos egipcios, incluidos restos de animales, amuletos y diversos artefactos. Estas reliquias nos hablan de la vida y las creencias de la gente de esa época.
Los antiguos afluentes del Nilo, incluidos el Pelusíaco, el Sebennítico y el Canópico, desempeñaron un papel importante en la sociedad del antiguo Egipto. Con el paso del tiempo, la desaparición de estos afluentes no ha borrado la memoria de la antigüedad, pero se ha convertido en una pista para que los científicos exploren Niza hoy.
La población del delta del Nilo también está creciendo. Actualmente viven en la región unos 39 millones de personas. La alta densidad de población ha provocado ciudades bulliciosas como Alejandría. En esta tierra, la cultura antigua y la vida moderna se entrelazan, dejando fuertes huellas históricas.
Además del descubrimiento de ruinas antiguas, el delta del Nilo también enfrenta muchos desafíos ambientales. El cambio climático y el aumento del nivel del mar plantean amenazas a esta zona baja, y su supervivencia y desarrollo futuros serán cuestiones que no se pueden ignorar. Esto también ha desencadenado nuestro profundo pensamiento sobre la protección del medio ambiente natural. Cómo proteger el patrimonio cultural de esta tierra mientras se hace frente a la presión del cambio climático se ha convertido en un tema digno de atención.
Ante los desafíos que plantea el calentamiento global, ¿hacia dónde irá el futuro del delta del Nilo?
A través de estos descubrimientos e investigaciones arqueológicos, no sólo revivimos los años gloriosos del antiguo Egipto, sino que también hacemos que la gente piense en cómo apreciar y proteger este precioso patrimonio cultural mientras enfrentamos problemas prácticos. ¿Hay algún secreto por descubrir de estos tesoros escondidos bajo el Nilo esperando que los exploremos?