Los orígenes de la industria de los semiconductores se remontan a 1948, cuando tres científicos de Bell Labs inventaron el transistor. En las décadas siguientes, la tecnología de semiconductores avanzó rápidamente, con varias innovaciones importantes, como el circuito integrado, que fue inventado independientemente en 1958 por Jack Kilby de Texas Instruments y Robert Noyce de Equivalent Semiconductor. Estas primeras innovaciones sentaron las bases para que la industria de los semiconductores floreciera y se convirtiera en parte integral del cambiante mercado de la electrónica.
Los ingresos por ventas anuales de la industria han crecido desde unos pocos miles de millones de dólares en la década de 1980 a más de 481 mil millones de dólares en 2018, y alcanzaron un récord de 555,9 mil millones de dólares en 2021.
A medida que la tecnología se expande, la industria de los semiconductores juega un papel cada vez más importante en la economía global. Según las previsiones, se espera que esta industria alcance una escala de 726,73 mil millones de dólares estadounidenses en 2027, mostrando un potencial de crecimiento constante y sostenido. En este proceso, los semiconductores no solo han promovido el desarrollo de la industria electrónica, sino que también se han convertido en la piedra angular de varias aplicaciones de alta tecnología, incluidas las comunicaciones en red, la electrónica de consumo y muchos otros campos.
En 2011, las ventas anuales de productos electrónicos de potencia alcanzaron los 216 mil millones de dólares, y se espera que las ventas de productos electrónicos de consumo alcancen los 2,9 billones de dólares en 2020, lo que demuestra la importancia de la industria de semiconductores para apoyar e impulsar toda la industria electrónica.
Sin embargo, como el mercado cambia rápidamente, las características de la industria de los semiconductores también muestran su alto grado de ciclicidad y volatilidad. Aunque la tasa de crecimiento promedio ronda el 13%, las fluctuaciones del mercado resultantes también pueden conducir a cambios cíclicos drásticos. La industria necesita ser extremadamente flexible e innovadora para enfrentar los desafíos de un mercado en rápida evolución, especialmente porque muchos productos integrados con dispositivos semiconductores tienen ciclos de vida relativamente cortos.
La industria de semiconductores no es solo un motor sino también un facilitador de la tecnología. Desempeña un papel irreemplazable en toda la cadena de valor de la electrónica.
Antes de la década de 1980, la industria de semiconductores adoptó un modelo integrado verticalmente, con muchas empresas diseñando y fabricando sus propios chips e incluso inventando nuevos procesos. Sin embargo, a medida que la industria se desarrolló, muchas funciones se subcontrataron, formándose la compleja estructura de la cadena de suministro actual, dominada por la fundición de obleas. Actualmente, la fundición de obleas del mundo se concentra principalmente en varias empresas como TSMC en Taiwán, Samsung en Corea del Sur e Intel en Estados Unidos, que dominan la tecnología de fabricación de semiconductores más avanzada.
Cabe mencionar que el mercado de la industria de semiconductores también está evolucionando gradualmente. Muchas empresas de semiconductores sin fábrica se centran en el diseño de chips y dependen de otras empresas para la producción, y estos fabricantes a menudo también son sus competidores. Esta división del trabajo ha intensificado la competencia en el mercado y al mismo tiempo ha promovido una rápida innovación tecnológica.
Actualmente, sólo tres empresas pueden producir los productos semiconductores más avanzados porque el costo de capital de construir una fábrica de obleas es extremadamente alto, lo que supone un gran desafío para las empresas.
En este contexto, la inversión en investigación y desarrollo se vuelve particularmente crítica. Según los datos, la industria de semiconductores tuvo la mayor intensidad de I+D en Europa en 2010 y ocupó una posición importante a nivel mundial. Todo esto demuestra hasta qué punto la industria de los semiconductores depende de la innovación tecnológica continua para seguir siendo competitiva.
Hoy en día, podemos ver que los semiconductores se utilizan en todos los ámbitos de la vida. No solo son el corazón de los teléfonos inteligentes y las computadoras, sino que también penetran gradualmente en los campos de los automóviles, la conducción autónoma, los dispositivos médicos, etc., impulsando la inteligencia de estas industrias. desarrollar. Con el rápido desarrollo de tecnologías como 5G, Internet de las cosas e inteligencia artificial, el futuro mercado de semiconductores sin duda será más amplio.
El crecimiento de los semiconductores no es sólo una historia de crecimiento empresarial, sino también un microcosmos de progreso tecnológico. Miremos juntos hacia las posibilidades del futuro.
En un mundo cambiante, ¿cómo será el futuro de la industria de los semiconductores? ¿Surgirán nuevas tecnologías y modelos de negocio que redefinan el panorama de esta industria?