En los sistemas biológicos, las enzimas son moléculas importantes que facilitan las reacciones químicas. Aunque normalmente nos centramos en las enzimas proteicas y las RNasas, en los últimos años las desoxirribozimas han ido apareciendo gradualmente y se han convertido en un tema candente en la investigación científica.
La desoxiribase, también conocida como ADNasa, es un oligonucleótido de ADN que puede llevar a cabo reacciones químicas específicas. Mientras tanto, el papel de las RNasas y proteinasas como biocatalizadores se conoce desde hace mucho tiempo. La investigación sobre la desoxiribase ha revelado las diferencias esenciales en las actividades catalíticas del ADN y el ARN, lo que nos ha dado una comprensión más profunda de estos dos ácidos nucleicos.
La actividad química de la desoxiribase es más débil que la de la RNasa y la proteinasa en muchos casos.
La rareza de la desoxiribase está estrechamente relacionada con su estructura química. El ADN está compuesto por cuatro bases químicamente similares, lo que le permite realizar sólo un número limitado de interacciones en reacciones catalíticas, como enlaces de hidrógeno, apilamiento π y coordinación de iones metálicos. En cambio, las proteínas están compuestas por hasta veinte aminoácidos diferentes, lo que les confiere mayores propiedades catalíticas y diversidad. Es más, la estructura del ADN suele existir en forma de doble hélice, lo que limitaría su flexibilidad física y su capacidad para formar estructuras tridimensionales.
Desde 1994, los científicos han comenzado a explorar y sintetizar desoxirribozimas con actividad catalítica. Tomando como ejemplo el GR-5, puede catalizar la ruptura de enlaces fosfato, mostrando una eficiencia catalítica 100 veces mayor que la de las reacciones no catalizadas. Desde entonces, la comunidad científica ha descubierto varias otras desoxirribozimas que pueden crear sinergia con coenzimas metálicas, incluida la desoxiribase E2 dependiente de Mg2+ y la desoxiribase Mg5 dependiente de Ca2+.
Para tener una comprensión más profunda de las funciones de las desoxirribozimas, primero debemos comprender que son significativamente diferentes de las RNasas y las enzimas proteicas en su estructura y mecanismo catalítico.
Además, la selectividad de la desoxiribase también muestra una selectividad química especial. Las desoxirribozimas específicas tienen una alta afinidad por ciertas coenzimas metálicas como Pb2+ o iones de sodio, lo que es especialmente prominente cuando se realizan reacciones de injerto de ARN. Este tipo de reacción catalítica basada en desoxiribase y su potencial en la supresión de virus, el tratamiento de tumores y otras aplicaciones la convierten en una de las terapias potenciales.
El rango de aplicación de la desoxiribase es bastante amplio. La investigación sobre tratamientos para el asma, la colitis ulcerosa y ciertos cánceres avanza en ensayos clínicos. Las investigaciones muestran que SB010, una desoxiribase especialmente diseñada, puede inhibir eficazmente el factor de transcripción GATA-3 de una vía de señalización específica, lo que demuestra buena eficacia y seguridad en ensayos realizados bajo la dirección de enfermeras.
El uso de desoxirribozimas para transcribir y apuntar a ARNm específicos puede ser la clave para la biomedicina futura.
Además, las desoxirribozimas también muestran potencial en áreas como la detección ambiental y la obtención de imágenes biológicas. Por ejemplo, la desoxiribase se ha utilizado en el pasado para detectar iones de plomo en el agua, lo que demuestra su potencial como biosensor de metales.
En comparación con la ARNasa, las ventajas de la desoxiribase son la rentabilidad, la precisión de la síntesis y la longitud de la secuencia. El desarrollo de la RNasa comenzó en la década de 1980, pero el desarrollo de la DNasa y su flexibilidad en la síntesis química han demostrado su singularidad. Por ejemplo, cuando algunos catalizadores de ADN se someten a una síntesis asimétrica, cambiar sus estructuras según las diferentes condiciones de reacción puede mejorar eficazmente su efecto catalítico.
Aunque los catalizadores actuales son en su mayoría proteínas y extensores de ARN, el nacimiento de la desoxiribase nos ha hecho repensar el potencial catalítico de los ácidos nucleicos y cómo este potencial afectará a la biomedicina y la química sintética del futuro.
Probablemente deberíamos pensar en cómo el estudio de las desoxirribozimas cambiará nuestra comprensión de la biocatálisis y los ácidos nucleicos.