El sistema nervioso simpático (SNS) es uno de los tres componentes principales del sistema nervioso autónomo, los otros dos son el sistema nervioso parasimpático y el sistema nervioso entérico. Este sistema funciona mayoritariamente de forma inconsciente, principalmente regulando la respuesta de “lucha o huida” del cuerpo para mantener el equilibrio interno. Sin embargo, su impacto no se limita a las emociones o situaciones, sino que afecta profundamente las respuestas fisiológicas y, a su vez, nuestro estado de salud.
La función principal del sistema nervioso simpático es facilitar la respuesta de lucha o huida del cuerpo, pero también juega un papel importante en una variedad de procesos fisiológicos.
El sistema nervioso simpático contiene dos tipos principales de neuronas: neuronas anteriores y neuronas posteriores. Las neuronas anteriores se originan en la región toracolumbar de la médula espinal (T1 a L2~L3) y luego se conectan al sistema de plexos, que a su vez afecta múltiples partes del cuerpo. Cuando la neurona anterior libera acetilcolina, inicia la acción de la neurona posterior, que a su vez libera noradrenalina, afectando los tejidos periféricos objetivo.
El sistema nervioso simpático es el principal responsable de regular las respuestas fisiológicas, como acelerar el ritmo cardíaco, dilatar los bronquios, reducir la actividad intestinal y contraer los vasos sanguíneos. Todas estas respuestas tienen un mismo propósito: preparar el cuerpo para afrontar el estrés.
Cuando nos enfrentamos a una amenaza potencial, la actividad del sistema nervioso simpático aumenta rápidamente, una respuesta conocida como respuesta de "lucha o huida".
Los sistemas nerviosos parasimpático y simpático trabajan juntos para coordinar el funcionamiento de los órganos internos del cuerpo. Mientras que el sistema nervioso simpático promueve la actividad, el sistema nervioso parasimpático promueve el descanso y la digestión. Esta interacción garantiza que el cuerpo funcione de manera óptima en diferentes situaciones.
Trastornos del sistema nervioso simpáticoLa disfunción del sistema nervioso simpático se ha relacionado con una variedad de problemas de salud, como insuficiencia cardíaca, diabetes y presión arterial alta. Estos problemas a menudo están relacionados con el estrés fisiológico o los hábitos de vida a largo plazo y tienen profundas repercusiones en la salud.
Las investigaciones sugieren que la hiperactivación del sistema nervioso simpático puede estar relacionada con problemas de salud mental como la ansiedad y el trastorno de estrés postraumático (TEPT).
Los cambios en el sistema nervioso simpático pueden provocar una variedad de síntomas físicos, como migrañas, insomnio, ansiedad, etc. La aparición de estos síntomas suele estar estrechamente relacionada con el estrés en la vida. Se necesitarán futuras investigaciones para explorar más profundamente el papel del sistema nervioso simpático en estas enfermedades y cómo equilibrar su función para mantener la salud.
Entender el papel del sistema nervioso simpático en nuestro centro de respuesta fisiológica nos hace pensar si los ajustes individuales en la salud y el estilo de vida pueden cambiar nuestra capacidad para afrontar el estrés y cómo cambiará nuestro estado fisiológico.