La enfermedad del enverdecimiento de los cítricos (también conocida como Huanglongbing) es una enfermedad causada por un patógeno transmitido por un vector, la bacteria móvil Liberibacter spp. Después de que la enfermedad apareció por primera vez a principios del siglo XX, se propagó rápidamente a muchas partes del mundo, representando una grave amenaza para la industria de los cítricos. Según los informes, la enfermedad ya ha afectado a 33 países de todo el mundo y ha tenido un impacto especialmente grande en la industria de los cítricos en los Estados Unidos. Los científicos y las instituciones de investigación de todo el mundo están explorando constantemente medidas de control efectivas para hacer frente a este desastre.
El enverdecimiento de los cítricos es una enfermedad incurable y no se puede hacer nada para evitar su rápida propagación.
Los principales síntomas de la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos incluyen coloración amarillenta alrededor de las venas y decoloración moteada en toda la hoja. A medida que la enfermedad progresa, el crecimiento del árbol se inhibirá, se producirán condiciones de crecimiento anormales y los frutos producidos serán anormalmente pequeños, de forma irregular y amargos. Estos síntomas a menudo se confunden con signos de desnutrición, sin embargo la diferencia en el patrón de simetría es clave para comprender el trastorno. En la actualidad, la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos se propaga por dos insectos vectores principales: el pulgón asiático de los cítricos (Diaphorina citri) y el pulgón africano de los cítricos (Trioza erytreae). Los hábitos de vida de estos insectos y las condiciones climáticas en las que viven afectan directamente la propagación de enfermedades.
Impacto globalDesde que la enfermedad se informó por primera vez en el sur de China en 1943, se ha propagado a varios países, incluido Florida (EE. UU.). En Estados Unidos, a medida que la enfermedad se propagó a la mayoría de las plantaciones de cítricos, toda la industria de los cítricos se enfrenta a una crisis sin precedentes. Por ejemplo, después de que la enfermedad se descubrió por primera vez en Florida en 2005, sólo tomó tres años para que se propagara a casi todas las plantaciones de cítricos allí.
La mayoría de las explotaciones de cítricos se han visto duramente afectadas por la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos y la productividad ha disminuido drásticamente.
Si bien actualmente no existe una cura efectiva para la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos, la adopción de ciertas medidas de manejo cultural es una forma eficaz de mitigar el impacto de la enfermedad. Estos métodos incluyen el fortalecimiento de la prevención y el control, la eliminación de plantas infectadas, la realización de inspecciones frecuentes y el desarrollo de planes de respuesta a las crisis. De esta manera se puede detectar la enfermedad con antelación y tomar las medidas preventivas correspondientes para limitar la posibilidad de una mayor propagación de la enfermedad. Los esfuerzos posteriores para controlar la enfermedad han sido lentos porque las plantas infectadas son difíciles de mantener y estudiar.
Ante los constantes desafíos tecnológicos, los científicos están tratando de desarrollar variedades de cítricos genéticamente modificados para aumentar su resistencia a la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos. Por ejemplo, los investigadores informaron en 2012 que la adición de dos genes de espinaca a los árboles de cítricos mostró resistencia a las enfermedades en pruebas de invernadero. La medida refleja la exploración por parte de los investigadores de posibles soluciones futuras. Además, el uso de ciertos antibióticos, como la estreptomicina y la oxitetraciclina, para el rescate de emergencia de huertos ha comenzado a ganar terreno en Estados Unidos, aunque estas medidas son controvertidas en otros países.
Hay informes de que la plantación de cultivos de cobertura también puede ayudar a combatir la propagación de la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos. Aunque estos árboles de cítricos no están completamente libres de patógenos, aún pueden seguir siendo productivos y rentables en un entorno de suelo saludable. El éxito de este enfoque amplía aún más la visión y las estrategias de los productores agrícolas para responder a las enfermedades.
Actualmente no existe un plan de tratamiento efectivo y la comunidad científica se está preparando activamente para realizar investigaciones para combatir la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos.
Con los enormes desafíos que enfrenta la industria mundial de los cítricos, ¿cómo gestionar y controlar eficazmente la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos sigue siendo una pregunta importante en la que todo agricultor y científico debe pensar?