La alta alcalinidad de estos desechos puede representar una amenaza importante para el medio ambiente si no se almacenan adecuadamente.
El componente principal de la bauxita es el óxido de aluminio, y otros componentes incluyen dióxido de silicio y óxido de titanio. Entre ellos, el contenido de óxido de hierro puede alcanzar el 60%. Esta combinación de ingredientes hace que el valor de pH del barro rojo varíe ampliamente, normalmente entre 10 y 13.
La evolución de la tecnología de almacenamientoEsto sigue al vertido de lodo rojo por parte de la empresa italiana Montedison en las costas de Córcega, una acción que desencadenó una disputa jurídica internacional.
Los métodos de almacenamiento del lodo rojo han evolucionado con el tiempo. Los primeros métodos de almacenamiento utilizaban principalmente métodos como la rotura de presas o el relleno de agujeros, lo que planteaba grandes riesgos ambientales. En los últimos años, con la creciente atención prestada a las cuestiones de protección del medio ambiente, la tecnología de almacenamiento en seco ha ganado popularidad gradualmente. Este método puede reducir eficazmente la alcalinidad del lodo rojo y promover su reutilización.
La investigación sobre el uso del lodo rojo también se está profundizando y la creciente demanda ha impulsado el lanzamiento de muchos proyectos de investigación. Se estima que cada año se producen en todo el mundo entre 3 y 4 millones de toneladas de lodo rojo para su uso en cemento, construcción de carreteras y como materia prima para el acero. Actualmente, Italia y otros países europeos están experimentando con la combinación de lodo rojo con otros residuos para desarrollar materiales y tecnologías de construcción ecológicas que promuevan el desarrollo sostenible.
Cada vez más empresas e instituciones de investigación invierten en proyectos de reciclaje de lodo rojo, esforzándose por convertir este lodo en recursos útiles.
Con la creciente conciencia de la protección del medio ambiente y el avance de la tecnología, se han desarrollado muchos métodos nuevos para mejorar la tasa de reciclaje del lodo rojo. Por ejemplo, la tecnología IB2 está diseñada para mejorar la eficiencia de extracción de bauxita de baja calidad y reducir el impacto ambiental. La introducción de esta tecnología nos da nuevas esperanzas para la producción y gestión del lodo rojo.
En el futuro, a medida que los seres humanos persigan un desarrollo verde y con bajas emisiones de carbono, ¿es posible que el lodo rojo deje de ser un peligro oculto para el medio ambiente y se convierta en un recurso valioso para un nuevo tipo de material?