Desde el lanzamiento de la App Store el 10 de julio de 2008, este mercado de aplicaciones desarrollado y mantenido por Apple ha cambiado por completo la forma en que se distribuyen y venden aplicaciones en todo el mundo. Los usuarios pueden explorar y descargar fácilmente aplicaciones certificadas por Apple, que no se limitan a iPhone y iPod Touch, sino que también se pueden usar en iPad, y algunas aplicaciones incluso se pueden usar en otros dispositivos como Apple Watch y Apple TV. Sin embargo, a pesar de la conveniencia y la gran cantidad de nuevas oportunidades que trae, el modelo de comisiones de la App Store ha generado críticas e insatisfacción entre muchos desarrolladores, especialmente el recorte del 30% de los ingresos que se lleva Apple.
"Vivimos en la era de la economía de las aplicaciones y los desarrolladores se sienten oprimidos por las altas comisiones de Apple".
Según informes recientes, la App Store de Apple tiene actualmente más de 1,8 millones de aplicaciones y Apple ha pagado más de 155 mil millones de dólares a desarrolladores desde su apertura. Sin embargo, detrás de estos datos se esconde el descontento de muchos desarrolladores con la comisión de Apple.
Polémica sobre el modelo de comisiónEn la App Store, los ingresos de los desarrolladores se dividen 70/30, lo que significa que los desarrolladores reciben el 70% de los ingresos por ventas de la aplicación, mientras que Apple se lleva el 30%. A los ojos de los grandes desarrolladores, esta proporción no se considera demasiado alta, pero para muchas pequeñas startups, estas comisiones les dificultan la supervivencia. Especialmente en un mercado altamente competitivo, esta comisión del 30% puede afectar directamente el modelo de ganancias y las operaciones comerciales del desarrollador.
"Algunos desarrolladores incluso dijeron que debido a tales comisiones, tienen que considerar si continuar operando en la App Store".
Además, la relación entre Apple y los desarrolladores se ha vuelto cada vez más tensa. Muchos desarrolladores creen que este modelo otorga a Apple un monopolio de facto y limita su potencial de ingresos. Numerosas demandas y quejas también muestran que los desarrolladores son cada vez más incapaces de aceptar esa distribución de beneficios y esperan que el gobierno pueda intervenir para investigar las prácticas comerciales de Apple.
Intervención gubernamental y desafíos regulatoriosDebido a las continuas demandas de los desarrolladores, los reguladores de algunos países han comenzado recientemente a investigar el comportamiento de mercado de Apple. Tomando a los Países Bajos como ejemplo, en octubre de 2021 la Autoridad de Consumidores y Mercados de los Países Bajos (ACM) se pronunció sobre el sistema de pagos internos de Apple, considerando que la práctica era anticompetitiva y exigiendo a Apple que realizara cambios. La ocurrencia de este tipo de incidentes ha puesto el modelo de negocio de Apple bajo una presión cada vez mayor.
"Es previsible que en el futuro más países y regiones comiencen a regular estrictamente el funcionamiento de la App Store".
Ante una presión de comisiones tan elevada, algunos desarrolladores han comenzado a adoptar nuevos modelos de ingresos para reducir su dependencia de Apple. En lugar de las ventas de aplicaciones tradicionales, cada vez más desarrolladores optan por utilizar modelos de suscripción o incluso financiación colectiva para aumentar los ingresos. Estos modelos no sólo pueden establecer un flujo de ingresos estable, sino que también ayudan a mejorar la fidelidad del usuario.
Por ejemplo, Apple lanzó el Programa para Pequeñas Empresas en 2020, reduciendo la tasa de comisión al 15% para los desarrolladores con ingresos anuales inferiores a 1 millón de dólares. Aunque esta política ha aliviado parcialmente la presión sobre algunos desarrolladores, todavía hay muchas voces que creen que esto es sólo una táctica dilatoria y que los cambios futuros son la clave.
A medida que aumentan los reclamos globales de cumplimiento y competencia leal, la dinámica del mercado está cambiando. Cada vez más países y organizaciones piden a Apple que ajuste sus estrategias operativas de manera oportuna para cumplir con las leyes y regulaciones de varios países. Esta medida afectará sin duda la política de comisiones de la App Store e incluso la distribución de beneficios de los desarrolladores en el futuro.
Por otro lado, seguirán surgiendo nuevos desafíos en el mercado, brindando a los desarrolladores más opciones y oportunidades. ¿Podrán encontrar un modelo de negocio más adecuado para lograr un crecimiento estable de los ingresos en esta era de cambio?
En un mercado de aplicaciones tan cambiante, ¿cómo se posicionarán los desarrolladores en el futuro para resistir la presión de las altas comisiones?