A medida que aumentan el cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos, es fundamental comprender cómo evaluar el poder destructivo de los huracanes y tornados. Esto no es sólo una consideración de seguridad para el edificio y sus habitantes, sino también parte de la previsión meteorológica y la investigación científica. En un entorno tan generalizado, surgió la escala Fujita mejorada (escala EF). ¿Cómo afecta esta escala nuestra comprensión de la intensidad de los tornados? Lo siguiente le proporcionará un análisis en profundidad de los antecedentes y el funcionamiento de la escala EF y su importancia en aplicaciones prácticas.
La Escala Fujita mejorada es un estándar utilizado para calificar la intensidad de huracanes y tornados en función de la cantidad de daño que causan. Estados Unidos utiliza oficialmente esta escala desde 2007, y con el tiempo otros países como Francia y Brasil han implementado estándares de evaluación similares. La escala EF no sólo proporciona seis clasificaciones de EF0 a EF5 para evaluar la velocidad del viento, sino que también mejora la evaluación de los daños a diversas estructuras, como edificios y vegetación.
La escala EF introduce más indicadores de daños, lo que le permite estandarizar y expresar más claramente lo que antes era una evaluación relativamente subjetiva.
La predecesora de esta escala es la escala Fujita, fundada en 1971 por el meteorólogo Ted Fujita. Tras la observación y el estudio de los daños causados por los tornados, en 2006 se propuso la escala EF y se puso en uso oficialmente en 2007. Este cambio no fue sólo una extensión de los daños, sino que también tuvo en cuenta la masa del edificio y su capacidad para resistir el viento. Además de Estados Unidos, países como Canadá y Francia han implementado aplicaciones modelo basadas en sus estándares nacionales.
La escala EF evalúa la intensidad de los tornados en función de diferentes indicadores de daño (Di), y se define con precisión el grado de daño (DoD) para cada tipo de estructura. Los 28 indicadores de daños cubren viviendas, edificios comerciales y vegetación natural. A través de este sistema, los meteorólogos e ingenieros pueden determinar el impacto de fuertes vientos en un edificio específico en función del daño específico a la estructura.
Con la mejora gradual de la escala EF, también se ha ajustado el método de evaluación de la velocidad del viento. Aunque el nivel EF5 se define como velocidades del viento que superan las 200 millas, los investigadores han redefinido durante mucho tiempo la velocidad del viento que realmente causa tal daño.
La principal diferencia entre la escala EF y la antigua escala Fujita es su consideración de los estándares de construcción. Los estándares de velocidad del viento de la escala Fujita se consideraron demasiado altos y la nueva escala EF mostró que el mismo daño podría ocurrir con velocidades de viento más bajas. El propósito de este cambio es hacer que el proceso de evaluación sea más consistente y refleje con mayor precisión los efectos del viento.
Los investigadores esperan realizar diseños más estandarizados en la escala EF en el futuro e introducir nuevas tecnologías y métodos tanto como sea posible para mejorar la precisión de la predicción de la velocidad del viento, como el uso de radar Doppler móvil. A través de estos avances tecnológicos, se espera que las futuras evaluaciones de tornados sean más precisas y proporcionen datos importantes necesarios para el diseño de seguridad de los edificios.
Con los desafíos que plantea el cambio climático, es cada vez más importante comprender con precisión el daño potencial de los tornados y evaluarlos a través de la escala EF. A través de esta norma, no sólo podemos discernir mejor el poder de las fuerzas naturales, sino también ser más eficaces en la prevención y mitigación de desastres. De cara al futuro, ¿cómo cree que la sociedad puede prepararse mejor ante posibles desastres naturales?