La tecnología de grabación con alambre de acero, también conocida como grabación con alambre magnético, es la primera tecnología de grabación magnética desarrollada. Esta tecnología de almacenamiento de audio analógico graba principalmente señales de sonido mediante niveles de magnetización cambiantes. Mirando hacia atrás en la historia, en 1898, el ingeniero danés Valdemar Poulsen inventó por primera vez la tecnología para grabar sonido y su producto se llamó Telegraphone. En 1903, la American Telegraph Company inició la producción comercial de este tipo de grabadora. El cable de acero pasaba rápidamente por el cabezal de grabación y se magnetizaba según la señal electroacústica en tiempo real, convirtiendo así el sonido en un formato que pudiera conservarse permanentemente.
El equipo de grabación con alambre de acero utiliza alambre de acero magnetizado para grabar y reproducir sonido, y tiene un alto grado de velocidad de medios.
La historia de la grabación por cable comenzó en 1898. Con el tiempo, muchas empresas la mejoraron y la produjeron continuamente en las décadas de 1920 y 1930. Sin embargo, debido a limitaciones técnicas, su uso aún era muy limitado. En la década de 1950, la grabación en cinta magnética comenzó a acercarse y reemplazar a la grabación por cable, convirtiéndose gradualmente en la corriente principal del mercado. Sin embargo, los registradores de cable todavía tienen ventajas únicas en ciertas áreas, como en los registradores de vuelo, donde sus propiedades más resistentes al calor y robustas los convierten en una opción ideal.
La grabadora de alambre fue utilizada como técnica de engaño sonoro por el "Ghost Corps" del ejército estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial, demostrando su potencial bajo ciertas condiciones.
Las características técnicas de la grabación por cable residen en el formato de soporte utilizado y la calidad del audio. El diseño original de Poulson colocó los polos del cabezal de grabación a cada lado del cable. Este método de magnetización transversal funcionó inicialmente, pero la torsión del cable durante la reproducción resultó en una calidad de sonido inestable. Con el avance de la tecnología, el cabezal de grabación mejorado coloca los dos polos en el mismo lado, lo que hace que el proceso de magnetización sea más estable y mejora la sensibilidad de la reproducción.
En comparación con la grabación en cinta, la claridad del audio y la autenticidad de las grabadoras de cable son muy impresionantes. Casi no hay interferencias del ruido de fondo, lo que hace que la calidad del sonido sea comparable a la de los discos de vinilo actuales. Aunque surgen algunas dificultades al manipular alambre de acero, como el bobinado y empalme de alambre de acero, estos desafíos técnicos no han impedido el uso del grabado con alambre de acero en ciertos escenarios profesionales.
El cable se puede reutilizar, lo que hace posible la grabación a largo plazo y se convierte en una opción de entretenimiento en el hogar.
El auge de la grabación por cable en la década de 1950 afectó a muchas áreas, incluidas la radiodifusión comercial y la composición musical. Muchos programas de radio famosos optaron por utilizar grabadoras de cable, que fueron reemplazadas gradualmente por grabadoras a partir de mediados de la década de 1960. Pero la grabación por cable todavía tiene su lugar en algunas aplicaciones especiales, como la grabación de aviones pilotados a distancia y la transmisión de datos relacionados.
El desarrollo y la evolución de la grabación por cable no solo representa un progreso tecnológico, sino que también afecta profundamente la forma en que se graba el audio. Aunque la grabación en cinta ha tomado el relevo, las propiedades y técnicas únicas de la grabación por cable siguen desempeñando un papel en determinados campos profesionales. ¿También tiene curiosidad por saber qué nuevas tecnologías de grabación surgirán en el futuro y cambiarán nuestra comprensión de la preservación del sonido?