El dominio efector de muerte (DED) es un dominio de interacción de proteínas único que solo existe en eucariotas y puede regular una variedad de vías de señalización celular. Este dominio se encuentra en procaspasas inactivas y en proteínas implicadas en la regulación de la cascada apoptótica, como las proteínas con dominios de muerte de unión a FAS (FADD). La investigación actual muestra que el papel fundamental de la EOS en las decisiones de vida y muerte celular no se limita a la apoptosis.
La estructura de la EOS revela su importancia en la apoptosis y otros procesos celulares.
DED es una subfamilia de la superfamilia del dominio de la muerte. Su estructura consta de seis hélices α, lo que la hace similar a otras estructuras, como el dominio de reclutamiento de caspasa (CARD) y el dominio de piridina (PYD) y el dominio de la muerte. (DD). Aunque estas subfamilias difieren en las características laterales, sus estructuras básicas de hélice α son similares.
La apoptosis es un proceso de muerte celular controlado y programado que tiene importantes ventajas sobre el ciclo de vida de un organismo. La vía apoptótica extrínseca está dirigida por una familia de proteasas que se activan en respuesta a estímulos de muerte. Es fundamental comprender el papel de la EOS en este proceso, particularmente en la formación del complejo de señalización de la muerte (DISC).
El DED de FADD forma una estructura estable mediante la autoagregación, lo que promueve la transmisión de señales letales.
Durante la formación de DISC, la interacción entre pro-caspasa-8 (pro-caspasa-8) y FADD es fundamental para el inicio de la apoptosis. Esta interacción conduce a la dimerización de la procaspasa, lo que lleva a su activación y, en última instancia, a la ejecución de la muerte celular.
En particular, la pro-caspasa-8 también puede heterodimerizarse con otra proteína con EOS, FLIPL. La caspasa británica de FLIPL no es suficiente para iniciar el proceso apoptótico típico, pero puede guiar la necroptosis. Este fenómeno resalta la complejidad y la naturaleza bidireccional del papel de la EOS en la vida y muerte celular.
La familia de proteínas DED incluye caspasa-8, caspasa-10, proteína inhibidora tipo FLICE, etc. Estas proteínas desempeñan un papel fundamental en la apoptosis y otros procesos celulares.
Las familias de proteínas más famosas incluidas en la EOS son la caspasa-8 y la caspasa-10. Estas enzimas no sólo realizan la descomposición estructural de las células durante la apoptosis, sino que también participan en la regulación de la vida y muerte celular. De manera similar, la proteína inhibidora tipo FLICE (c-FLIP) puede prevenir la señalización de los receptores de muerte, previniendo así la aparición de apoptosis.
Comprender cómo actúan la EOS y sus complejos en los procesos celulares de vida y muerte podría ayudar a tratar una variedad de enfermedades, incluido el cáncer. Cuando el proceso de apoptosis es anormal, puede provocar diversas afecciones patológicas como cáncer, inflamación y enfermedades neurodegenerativas. Las estrategias terapéuticas futuras pueden apuntar a las vías relacionadas con la EOS para promover la muerte de las células dañadas y la restauración del equilibrio fisiológico.
Los científicos comprometidos con la exploración de la EOS están trabajando arduamente para revelar su papel potencial en diferentes enfermedades. Entonces, ¿qué nuevas posibilidades de tratamiento revelará la EOS en futuras investigaciones médicas?