Mortierella es un hongo del suelo que pertenece al orden Mortierellales y al subfilo Mortierellomycotina. Este amplio género contiene aproximadamente 85 especies, que cubren una amplia gama de adaptaciones ecológicas. Su diversidad y resistencia en una variedad de entornos han hecho que los investigadores se interesen en estas pequeñas criaturas.
El género Mortierella lleva el nombre del botánico belga Bartomeu Dumotier, quien hizo profundas contribuciones a la botánica en el siglo XIX.
Ecológicamente, las especies de Mortierella llevan una vida saprofita, creciendo en el suelo, hojas de plantas en descomposición y otra materia orgánica. Algunas especies pueden incluso sobrevivir a base de heces de animales o exoesqueletos de artrópodos. La investigación de G.A. Salt muestra que las especies de Mortierella crecen con más frecuencia en las raíces de los abetos que otros hongos, lo que demuestra su superior competitividad cerca de las raíces de las plantas.
Morfológicamente, los hongos Mortierella son generalmente simbióticos, pero tienden a formar más septos que Mucor. Cuando se reproducen sexualmente forman gametocarpos similares a los de Mucor, demostrando su diversidad evolutiva.
El crecimiento de Mortierella se ve afectado por fuentes de carbono, minerales y fuentes de nitrógeno. La proporción de carbono y nitrógeno en el medio de cultivo es particularmente importante.
La mortierella se puede cultivar en medios ricos en nutrientes, como extracto de levadura y harina de pescado. En los laboratorios, los investigadores suelen utilizar agar de patata y azúcar o agar de harina de maíz como medio de cultivo. Además, las especies del género Mortierella poseen una excelente capacidad quitinolítica y pueden descomponer eficazmente la quitina, y este rendimiento es cercano al de algunos actinomicetos quitinolíticos. Durante el proceso, Mortierella también puede usar xilanasa para descomponer la hemicelulosa vegetal en azúcar para su crecimiento.
Las especies de Mortierella exhiben diferentes estrategias reproductivas en el desarrollo sexual y asexual, lo que les permite adaptarse mejor a entornos cambiantes.
Algunas especies de Mortierella muestran características de desarrollo sexual además de la reproducción asexual. En la reproducción sexual, las gametotecas se forman por la fusión de diferentes floculados, y estas gametecas pueden formar una capa de hifas estériles durante el desarrollo. Las características sexuales de Mortierella también son bastante diversas, con algunas especies capaces de autofecundarse y reproducirse, mientras que la mayoría requiere cruzamiento.
Además de su diversidad ecológica y reproductiva, los investigadores consideran que Mortierella es un objetivo importante para la biotecnología. Entre ellos, Mortierella alpina puede producir ácidos grasos poliinsaturados como el ácido γ-linolénico, que tienen valor potencial en aplicaciones médicas y nutricionales. Con la profundización de la investigación, los científicos descubrieron gradualmente que Mortierella puede producir grandes cantidades de ácido araquidónico dependiendo del medio de cultivo y las condiciones de cultivo. Este descubrimiento ha atraído una amplia atención en los campos médico y alimentario.
Sin embargo, la mayoría de las especies de Mortierella no son patógenas para las plantas, los animales o los humanos, pero pueden desempeñar un importante papel de descomposición en el ecosistema. Pero hay algunas excepciones, como Mortierella wolfii, que se consideran patógenas para los humanos y otros animales y causan enfermedades como abortos y neumonía en el ganado.
La razón por la que Mortierella puede sobrevivir en un entorno tan diverso se debe a su capacidad altamente desarrollada para adaptarse al medio ambiente. No sólo puede descomponer eficazmente la materia orgánica, sino que también puede encontrar sus propias huellas en entornos impredecibles. ¿Qué tipo de leyes naturales y sabiduría ecológica revelan los secretos de estos hongos?