En nuestra vida diaria, el uso de energía térmica es común e importante, ya sea para cocinar simplemente o para plantas de energía a gran escala, la conversión de energía térmica existe sin excepción. Sin embargo, ¿por qué no podemos lograr una conversión perfecta de la energía térmica? ¿Cuáles son las razones detrás de esto? Esto implica un concepto importante de entropía: la generación de entropía (o generación de entropía).
La generación de entropía es la cantidad de entropía producida en un proceso térmico y se utiliza para evaluar la eficiencia del proceso.
El concepto de entropía se remonta a 1824, cuando el físico Carnot se dio cuenta de la importancia de evitar procesos irreversibles. En 1865, Rudolf Clausius amplió su investigación preliminar de 1854 sobre las "transiciones no compensadas" (unkompensierte Verwandlungen) y proporcionó una fórmula preliminar para la generación de entropía. Según su investigación, la cantidad de entropía generada se puede expresar mediante la siguiente fórmula:
N = S - S0 - ∫ dQ/T
Donde S es la entropía del estado final y S0 es la entropía del estado inicial. Según Clausius, si el proceso es reversible, entonces N = 0; si es irreversible, entonces N > 0.
Las leyes de la termodinámica se utilizan principalmente para describir el comportamiento de sistemas bien definidos, como la transferencia de calor y masa dentro y fuera de los límites en un sistema abierto no adiabático. La generación de entropía (generalmente representada por el símbolo Si) es uno de los elementos centrales de la segunda ley. Nos dice que en cualquier proceso natural, la tasa de cambio de entropía debe ser positiva o cero. Esta es una ley importante de la naturaleza.
La generación de entropía es un fenómeno inevitable en todo proceso en la naturaleza, y su tasa es siempre positiva o cero.
La generación de entropía ocurre principalmente en procesos irreversibles. Algunos procesos irreversibles importantes incluyen el flujo de calor a través de la resistencia térmica, la resistencia al flujo de fluidos, el efecto de calentamiento Joule, la fricción entre superficies sólidas y la viscosidad del fluido dentro del sistema. Estos procesos producirán una cierta cantidad de entropía, lo que reduce la eficiencia de conversión de la energía térmica.
La mayoría de los motores térmicos y refrigeradores suelen ser sistemas de circuito cerrado. En estado estacionario, la energía interna y la entropía del motor volverán a los valores iniciales después de completar un ciclo, por lo que la primera y segunda leyes de la termodinámica se pueden simplificar. Es en este contexto que podemos obtener una comprensión profunda de los principios de funcionamiento de los motores térmicos y los refrigeradores.
Para un motor térmico, la forma básica de su principio de funcionamiento es QH - Qa - P = 0, y la relación de entropía es QH/TH - Qa/Ta + Si = 0.
La esencia de estas ecuaciones es revelar cómo un motor térmico utiliza energía térmica para producir energía; sin embargo, la eficiencia máxima lograda en condiciones ideales es solo cuando la entropía es cero.
Con la comprensión cada vez más profunda de los principios de la termodinámica, el concepto de entropía se ha convertido sin duda en la clave para comprender el proceso de conversión de energía térmica, ya sea para aplicaciones de ingeniería o investigación científica. Sin embargo, ¿podemos superar las limitaciones de la generación de entropía y permitir que la energía térmica se convierta de forma continua y eficiente?