La teoría del color siempre ha sido un tema fascinante en la intersección del arte y la ciencia, sin embargo, la teoría tradicional del color rojo, amarillo y azul (RYB) ha sido cuestionada. Aunque el sistema RYB se ha considerado durante mucho tiempo como la base de la mezcla de colores, investigaciones recientes han demostrado que esta teoría no está completamente establecida en la ciencia óptica y de mezcla de colores moderna.
El color es una percepción subjetiva más que una propiedad puramente física, lo que hace que la teoría del color sea aún más complicada.
La teoría del color RYB se remonta al siglo XVII y muchos artistas y diseñadores la consideran el color básico. Sin embargo, esta teoría se basa principalmente en la experiencia con pigmentos más que en la comprensión científica de la luz.
Según esta teoría, el rojo, el amarillo y el azul se consideran colores primarios irreducibles a partir de los cuales se pueden mezclar todos los demás colores. Sin embargo, en la práctica no se pueden producir todos los colores posibles con estos tres colores. Algunos colores, especialmente cuando se trata de diferentes pigmentos y fuentes de luz, no se pueden componer con precisión a partir de colores primarios RYB.
De hecho, la mezcla de colores está limitada por las propiedades físicas de los pigmentos utilizados y la longitud de onda de la luz, no solo por la combinación de colores.
Por ejemplo, la teoría del color RYB se enseña ampliamente en muchos cursos de escuelas de arte, y muchos diseñadores todavía eligen el color basándose en esta teoría. Como lo expresó un artista digital: "Aunque principalmente diseño páginas web, todavía uso el rojo, el amarillo y el azul como base para mis elecciones de color". .
Desde una perspectiva científica, el modelo RGB, la mezcla de colores de rojo, verde y azul, proporciona una forma más física de mezclar colores. Este modelo funciona bien para mezclar luces y refleja con mayor precisión la percepción del color del ojo humano. La mayoría de las retinas humanas tienen tres tipos diferentes de células cónicas, lo que hace que el modelo RGB sea eficaz para reconstruir la mayoría de las percepciones de color.
La percepción del color depende no sólo del color en sí, sino también de la fuente de luz y su interacción con el sistema visual del observador.
Para el mundo del arte y el diseño, el proceso de mezcla de colores suele ser casi intuitivo, y los artistas confían en su experimentación y experiencia para crear color. La expresión del color se ve afectada por la textura del lienzo, el espesor de la pintura y la luz. Estas variables significan que las simplificaciones del sistema RYB pueden no reflejar la verdadera complejidad del color.
En una investigación realizada en la Universidad de Yale, los académicos descubrieron que la teoría del color RYB no tiene evidencia científica extensa. Más bien, puede ser una convención cultural e históricamente formada en lugar de estar basada en un verdadero teorema de la física.
Por lo tanto, como revelan la tecnología de impresión moderna y los sistemas de visualización digital, los modelos de color correspondientes, como CMYK (cian, magenta, amarillo y negro) y los modelos RGB, en realidad se construyen basándose en principios científicos y pueden explicar la mezcla y la percepción del color de manera más efectiva.
¿Alguna vez te has sentido confundido por la confusión de la teoría del color?
Finalmente, lo que deberíamos pensar es: en la práctica del arte y el diseño modernos, ¿cómo utilizar los fundamentos científicos de manera más efectiva para comprender profundamente la naturaleza del color?