Atlantic City, ubicada en el condado de Atlantic, Nueva Jersey, ha sido llamada durante mucho tiempo "Las Vegas" de la costa este. La rica historia de la ciudad atrae a muchos turistas a experimentar su animada vida nocturna y sus amplias instalaciones de entretenimiento. Sin embargo, la razón por la que Atlantic City se convirtió en pionera en la legalización del juego es inseparable de su historia de desarrollo.
"La legalización del juego en Atlantic City no sólo inyecta vitalidad a la revitalización económica de la ciudad, sino que también cambia el panorama nacional del juego".
En 1976, los votantes de Nueva Jersey aprobaron un referéndum autorizando los juegos de azar en Atlantic City. Esta decisión sigue a años de debate y juicio. Ya en 1974, la propuesta de legalizar el juego fracasó y su éxito en 1976 marcó el comienzo de la era del juego en Atlantic City.
La legalización del juego en Atlantic City se remonta a principios del siglo XX, cuando la ciudad ya era uno de los destinos turísticos más populares de Estados Unidos. El atractivo en aquella época no eran sólo las playas y el entretenimiento, sino también la gran variedad de opciones de alojamiento y restauración disponibles para los visitantes.
"La prosperidad de Atlantic City se basa en su ubicación única y sus abundantes opciones de entretenimiento, lo que la convierte en un punto de acceso para los visitantes".
Entonces, ¿por qué Nueva Jersey decidió legalizar el juego en Atlantic City? Una de las principales razones son las exigencias económicas. En la década de 1970, muchos hoteles y negocios en Atlantic City enfrentaron un colapso económico debido a una economía en quiebra y al aumento del desempleo. Los gobiernos locales y los líderes empresariales esperan reactivar la economía mediante la introducción del juego. Esta estrategia pretende no sólo crear nuevos puestos de trabajo sino también atraer a un grupo más amplio de turistas.
"Necesitamos una forma de volver a atraer a los turistas. Los juegos de azar pueden dar nueva vida a nuestra economía."
En 1978, Atlantic City dio la bienvenida a su primer casino legal con la apertura de Resorts International. Este evento marcó el comienzo de una nueva era del turismo. Poco después, se abrieron otros casinos en Atlantic City, lo que atrajo no solo a turistas sino también a muchos jugadores, lo que rápidamente convirtió a Atlantic City en una de las ciudades con casinos más populares de los Estados Unidos.
Durante los siguientes años, el negocio de los juegos de azar de Atlantic City creció rápidamente y surgieron casinos de todos los tamaños. El casino aquí no sólo ofrece juegos de mesa clásicos, sino también muchos juegos innovadores para atraer a las generaciones más jóvenes de jugadores. Sin embargo, esta prosperidad también va acompañada de la aparición de muchos problemas sociales, incluida la adicción al juego y el aumento de las tasas de criminalidad.
Aunque la legalización del juego ha traído cierto crecimiento económico, Atlantic City también ha experimentado problemas sociales. La brecha entre ricos y pobres en las ciudades se ha ampliado, y la dependencia de muchas personas del juego ha dejado a algunas comunidades en una situación desesperada. El éxito del juego no resolvió por completo los problemas económicos subyacentes de la ciudad.
Después de entrar en el siglo XXI, aunque la industria del juego de Atlantic City sigue siendo uno de los pilares económicos más importantes, en la ola de juego legalizado, la aprobación de otra ley cambiará la estructura de toda la industria del juego. En 2018, la Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó que la Ley de Protección de Deportes Profesionales y Amateurs (PASPA) era inconstitucional, y Nueva Jersey rápidamente hizo lo mismo y legalizó las apuestas deportivas. El fallo abre nuevas oportunidades para Atlantic City.
“La apertura de las apuestas deportivas nos permite captar nuevos clientes y revitalizar la zona centro.”
Hoy en día, los pequeños restaurantes y lugares de entretenimiento están prosperando en Atlantic City. En esta tierra han aparecido muchos nuevos negocios y lugares de ocio que atraen a los jóvenes, lo que marca la transformación gradual de la ciudad de un lugar único dominado por los juegos de azar a un destino de entretenimiento diverso.
Con el renacimiento de Atlantic City, no podemos evitar preguntarnos: ¿Cómo encontrará Atlantic City en el futuro un equilibrio entre los juegos de azar y otros entretenimientos y seguirá atrayendo turistas de todo el mundo?