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Las enfermedades agudas llegan de forma silenciosa: ¿Sabes cómo se producen los daños musculares?
En nuestra vida diaria, la infección bacteriana es un riesgo que acecha a nuestro alrededor. Aunque no se menciona con frecuencia, la rotura de un músculo llamada fascitis necrotizante no sólo es una enfermedad rara y peligrosa, sino que también puede ser una afección que pone rápidamente en peligro la vida. Esta enfermedad, a menudo llamada "enfermedad carnívora", es causada por bacterias que invaden el cuerpo y causan necrosis de los músculos y otros tejidos blandos.
Muchos pacientes pueden tener síntomas de absceso simple o celulitis al comienzo de la infección, lo que dificulta el diagnóstico temprano.
Los síntomas de la fascitis necrotizante aparecen rápidamente en unas pocas horas e incluyen enrojecimiento e hinchazón de la piel, dolor intenso, fiebre y secreción anormal. Los sitios más comunes de infección con esta enfermedad incluyen las extremidades y el perineo. Si no se trata, la infección se propagará rápidamente. Aunque la enfermedad no es común, cada año se reportan aproximadamente 1000 casos en los Estados Unidos y la incidencia de fascitis necrotizante aumenta a medida que aumenta la resistencia a los antibióticos.
Causas de la fascitis necrotizante
La causa más común de fascitis necrotizante es la infección bacteriana, especialmente bacterias comunes como Staphylococcus aureus y Streptococcus pyogenes. A menudo, estas bacterias ingresan al cuerpo a través de una herida en la piel, como un rasguño o una quemadura. Es especialmente probable que ocurra en pacientes que han tenido un trauma o cirugía reciente. Además de las lesiones externas, las personas con diabetes, obesidad o sistemas inmunológicos comprometidos también corren un alto riesgo.
Aunque la fascitis necrotizante se denomina "enfermedad carnívora", las bacterias no "comen" directamente el tejido humano, sino que liberan toxinas que causan la muerte del tejido.
Principales síntomas y retos del diagnóstico precoz
Los primeros síntomas de la enfermedad a veces se parecen a los de otras infecciones de la piel, lo que retrasa el diagnóstico preciso. Por ejemplo, enrojecimiento, hinchazón e incluso secreción purulenta son posibles signos tempranos. A medida que avanza la enfermedad, pueden aparecer síntomas más evidentes, como ampollas, gas palpable y manchas subcutáneas de color púrpura. Por lo general, el diagnóstico de esta enfermedad se basa en las características clínicas, pero los médicos también pueden conocer la afección mediante pruebas de imagen. En casos típicos, los médicos realizarán una cirugía de emergencia para extirpar el tejido infectado.
La importancia de los métodos de tratamiento y la cirugía
El tratamiento de la fascitis necrotizante representa un desafío crítico en la medicina de emergencia. Para controlar eficazmente la infección, los pacientes deben someterse a una cirugía de inmediato para extirpar el tejido infectado y el tratamiento con antibióticos debe iniciarse en una etapa temprana, que es la clave para evitar que la afección empeore. Si se retrasa el diagnóstico, el riesgo de muerte aumenta significativamente y los estudios muestran que cuanto más se espera durante el tratamiento, mayor es la probabilidad de muerte, que puede llegar al 25% al 35%.
Durante la cirugía, los médicos deben tomar medidas agresivas de desbridamiento y es posible que deban volver a eliminar el tejido infectado cada 12 a 36 horas para detener la propagación de la infección.
Influencias sociales y culturales
Los casos de fascitis necrotizante han atraído hasta cierto punto la atención social, especialmente cuando algunas celebridades contrajeron la enfermedad, acompañada de reportajes mediáticos y sorpresa del público. Por ejemplo, a Lucien Bouchard, futuro primer ministro de Quebec, Canadá, le amputaron la pierna debido a una infección, lo que causó un gran revuelo. La creciente influencia del conocimiento social ha llevado a una comprensión más profunda de la enfermedad.
En resumen, la fascitis necrotizante es una infección potencialmente mortal. Su rápido desarrollo y sus características de aparición hacen que el diagnóstico y el tratamiento oportunos sean cruciales. Ante esta enfermedad aún quedan muchas preguntas por investigar más por parte de la comunidad científica, como por ejemplo ¿por qué individuos sanos pueden infectarse con esta enfermedad sin ningún motivo?
