anticoagulantes, también conocidos como anticoagulantes, son productos químicos que prevenían o reducen la coagulación de la sangre, prolongando así el tiempo de coagulación.Muchas personas toman este tipo de fármaco debido a diversas enfermedades, incluida la fibrilación auricular, la trombosis venosa profunda y la enfermedad cardíaca.El uso de estos medicamentos puede reducir efectivamente el riesgo de trombosis, pero también trae ciertos riesgos de sangrado, especialmente en el caso de la cirugía, que es una pregunta que cada paciente y su equipo médico deben considerar cuidadosamente.
anticoagulantes son una clase de fármacos estrechamente vinculados a los fármacos antiplaquetarios y trombolíticos, destinados a prevenir diferentes procesos después de la coagulación de la sangre.
La función principal de los anticoagulantes es interferir con el proceso de coagulación de la sangre, lo que generalmente evita la actividad de ciertos factores de coagulación.Estas drogas se usan ampliamente en la comunidad médica, incluidas la warfarina y la heparina antigua, así como los anticoagulantes orales directos más nuevos, como Dabigatrán y Apixaban.Estos medicamentos se utilizan para tratar varias enfermedades cardiovasculares, sin embargo, los pacientes que usan anticoagulantes deben medir el riesgo de sangrado antes de la cirugía está a punto de ocurrir.
Uno de los mayores riesgos durante la cirugía es el sangrado.Los pacientes que han recibido anticoagulantes pueden experimentar eventos hemorrágicos no mayores o no mayores durante el procedimiento.Muchos expertos recomiendan discutir el estado de coagulación con el paciente antes de la cirugía para tomar una decisión sobre si suspender el anticoagulante después de una evaluación de riesgos.
Los pacientes sometidos a cirugía deben considerar el uso de anticoagulantes y planificar los cambios necesarios para reducir el riesgo de sangrado.
Antes de planificar una cirugía, los médicos generalmente consideran el tipo de cirugía y sus riesgos relativos basados en las características de diferentes anticoagulantes.Por ejemplo, para algunos procedimientos dentales simples, el uso continuo de anticoagulantes puede ser factible.Sin embargo, en la cirugía donde se requiere una incisión a gran escala, puede ser necesario suspender temporalmente el anticoagulante unos días antes de la operación.
Muchos estudios médicos han demostrado que suspender los anticoagulantes puede reducir el riesgo de sangrado.Sin embargo, esto aumenta el riesgo de trombosis, especialmente en pacientes con antecedentes de fibrilación auricular o trombosis venosa profunda.El desarrollo de un plan de tratamiento apropiado requiere que el equipo médico evalúe cuidadosamente los riesgos individuales para cada paciente, como el uso de métricas HA-BLED o CHA2DS2-VASC para predecir la probabilidad de sangrado.
Ciertos alimentos y suplementos tienen el efecto de promover o inhibir la coagulación.Por ejemplo, se cree que algunas hierbas, aceite de pescado, ajo, etc. mejoran el efecto de los anticoagulantes, mientras que las verduras de color verde oscuro pueden interferir con el efecto de los anticoagulantes.Por lo tanto, los pacientes deben evitar ingerir dichos alimentos antes de la cirugía para mantener la consistencia de las dosis anticoagulantes y garantizar la seguridad en la cirugía.
Para manejar eventos de sangrado repentino durante la cirugía, las instituciones médicas generalmente proporcionan agentes de inversión.Al usar warfarina, la vitamina K o el plasma recién congelado se usan comúnmente en la práctica clínica para revertir su efecto.Se necesita atención adicional para nuevos anticoagulantes directos, porque los agentes de inversión actuales en el mercado aún son limitados, y el tratamiento debe ser muy cauteloso.
El uso de anticoagulantes se convierte en un tema importante cuando los pacientes consideran la cirugía.El equipo médico necesita evaluar el impacto de la condición anticoagulante en curso en la cirugía y comunicarse completamente con los pacientes sobre riesgos y beneficios.Para los pacientes que se someten a tratamiento anticoagulante, comprender su estado sanguíneo y si la próxima cirugía aumenta el riesgo de sangrado es un paso clave para garantizar el éxito de la cirugía.¿Son suficientes las preparaciones antes de la cirugía y podemos entender claramente el impacto de los anticoagulantes?