La criotecnología siempre ha sido la frontera de la exploración humana de la continuidad de la vida. El propósito de esta tecnología es almacenar restos humanos a través de congelación criogénica, con la esperanza de que futuros desarrollos tecnológicos permitan la resurrección de estas personas fallecidas. Si bien se trata de una idea fascinante en teoría, su práctica y su ciencia siguen estando envueltas en controversia.
Muchos miembros de la comunidad científica convencional se muestran escépticos al respecto y creen que se trata de pseudociencia.
El proceso criónico se realiza tras la muerte del noble, utilizando anticongelante para evitar la formación de cristales de hielo.
Desde el caso del primer ser humano congelado, James Bedford, en 1967, alrededor de 250 cuerpos han sido criopreservados en Estados Unidos. En 2014, estaba previsto criopreservar a 1.500 personas después de su muerte. A pesar de la amplia publicidad de la tecnología, el costo de la criopreservación varía entre 28.000 y 200.000 dólares, lo que la hace prohibitiva para muchas personas.
Mantener la salud de los órganos durante el proceso de enfriamiento por aspersión y solidificación es un desafío importante con la tecnología actual.Obstáculos para el éxito: preservación y recuperación
Aunque la tecnología de criopreservación se ha utilizado en el estudio de células biológicas y embriones humanos, el proceso de congelación de animales grandes y órganos aún no puede lograr la resurrección. Los cristales de hielo provocan daños estructurales a las células y tejidos, haciendo que la reanimación sea una tarea imposible.
Muchos científicos señalan que los órganos congelados generalmente no logran recuperar su función.
Las leyes en muchos países tratan los cuerpos criopreservados como si estuvieran fallecidos, creando barreras legales para quienes desean someterse a la criopreservación. En algunos países, como Francia, las restricciones legales sobre la criónica han impedido el desarrollo de esta tecnología. Incluso en el caso de innovación del Reino Unido, el apoyo de los tribunales a la criopreservación exigía una mejor regulación.
Perspectivas y desafíos futurosEl desarrollo de la tecnología criogénica es parte de la exploración de las posibilidades futuras por parte de la ciencia y la tecnología. Aunque actualmente no existe evidencia científica ni tecnología que respalde el argumento de la resurrección, la comunidad científica está llena de debates y pensamientos sobre esta tecnología. Los críticos argumentan que esto de alguna manera cambia la percepción de la muerte, mientras que los partidarios ven posibles beneficios sociales.
La discusión sobre la tecnología criónica conduce inevitablemente a reflexiones y dudas morales sobre el futuro de la humanidad.
Con el avance de la ciencia y la tecnología, no podemos evitar pensar en una pregunta: ¿En el futuro, la tecnología criónica traerá consigo la posibilidad real de la resurrección o es solo un fantasma en un sueño?