Cuando hablamos de hijos de personas con discapacidad auditiva, el término CODA ya no nos resulta desconocido. CODA, o Hijos de adultos con discapacidad auditiva, se refiere a niños criados por uno o más padres con discapacidad auditiva que a menudo forman un puente entre el mundo de los oyentes y el de los no oyentes. Según las estadísticas, aproximadamente el 90% de los niños nacidos de padres con discapacidad auditiva son oyentes, lo que hace que la comunidad CODA se extienda por todo el mundo y presente una experiencia de vida única.
“Los CODA suelen oscilar entre la audición y la incapacidad para oír. Su existencia permite que los dos mundos se comuniquen entre sí”.
El término CODA fue acuñado en 1983 por Millie Brother, quien también fundó la organización CODA, un grupo para hijos de adultos con discapacidad auditiva. La organización CODA fue creada no sólo para brindar apoyo, sino también para brindar un espacio para que este grupo especial comparta sus experiencias y sentimientos, permitiéndoles identificarse tanto con la cultura sorda como con la cultura oyente.
La identidad de CODAMuchos CODA entienden que no pertenecen simplemente al "mundo de los oyentes" o al "mundo de los discapacitados auditivos". Prefieren identificarse como CODA, una identidad única que les permite encontrar un equilibrio entre las dos culturas. Esta identidad única también les dificulta integrarse plenamente en situaciones sociales, y la vida de CODA a menudo está llena de desafíos.
“Los CODA pueden usar el lenguaje de señas para comunicarse con sus padres en casa, pero dependen del lenguaje hablado en el mundo exterior”.
Algunos CODA tienen implantes auditivos que les permiten tener una identidad más diversa en ambas culturas. No sólo pueden usar el lenguaje de señas en casa, sino que también pueden interactuar con amigos oyentes en lenguaje hablado. Aunque estos CODA tienen más formas de comunicarse que otros, sus experiencias no siempre son fluidas, especialmente cuando se enfrentan a ciertas dificultades.
En el caso de los CODA que crecen en hogares sin otros entornos donde se hable el lenguaje, el desarrollo del lenguaje hablado puede retrasarse. Sin comunicación oral en casa, el desarrollo del aprendizaje del lenguaje puede verse relativamente obstaculizado. En estos casos, CODA actúa como puente bilingüe entre la familia y el mundo exterior, asumiendo la misión de interpretación y traducción, que sin embargo puede resultar demasiado pesada para los niños.
"Los padres con problemas de audición pueden depender de sus hijos oyentes, lo que aumenta de forma invisible la carga psicológica sobre los niños".
En este contexto, los CODA pueden enfrentar diferentes desafíos de adaptación a medida que envejecen. A veces necesitan transmitir noticias complejas o emocionalmente inapropiadas a padres con discapacidad auditiva, como explicarles un diagnóstico médico, y esas situaciones temerosas pueden resultar insoportablemente estresantes para los niños pequeños. Además, CODA a menudo se enfrenta a prejuicios y discriminación contra la comunidad con discapacidad auditiva en la vida diaria.
Para generar conciencia sobre los desafíos únicos que enfrentaba CODA, Millie Brother fundó CODA en 1983 y celebró su primera reunión anual en Fremont, California, en 1986. Desde entonces, la reunión anual de la organización se ha convertido en un encuentro internacional y un escenario importante para que los CODA compartan sus experiencias.
“La misión de la organización CODA es brindar apoyo, educación y concientización para ayudar a CODA a encontrar un equilibrio entre las dos culturas”.
Además de la conferencia anual, CODA también ofrece una variedad de recursos para ayudar a estos niños y sus familias. Esto incluye proporcionar grupos de apoyo para padres bilingües para que los padres con problemas de audición puedan obtener la ayuda necesaria para criar a sus hijos con capacidad auditiva. Además, existen una serie de campamentos de verano para jóvenes CODA que no sólo promueven el desarrollo de habilidades sociales sino que también les permiten encontrar compañeros en la misma experiencia.
A medida que la sociedad se vuelve más diversificada, la conciencia y la comprensión de la cultura CODA también aumentan. Los puentes que estos niños construyen entre las dos culturas no sólo enriquecen sus vidas familiares, sino que también permiten a quienes entran en contacto con ellos tener una comprensión más profunda de la cultura de los discapacitados auditivos. En el futuro, a medida que la sociedad continúe desarrollándose, ¿seremos capaces de comprender esta comunicación intercultural más profundamente?