La cría de salmón es una parte importante de la industria acuícola mundial e implica la cría y el crecimiento del salmón en un entorno controlado. Este proceso, que comienza con un huevo diminuto y termina en la mesa del comedor, implica mucha ciencia y tecnología, lo que le da a esta industria tradicional un aspecto totalmente nuevo. Cuando te sientas a disfrutar de un delicioso salmón en la mesa, ¿te has preguntado alguna vez cuál es el misterioso viaje que se esconde detrás de este alimento?
Historia y desarrollo de la cría del salmónLas raíces de la cría del salmón se remontan a finales del siglo XVIII en Europa. Con el desarrollo de la ciencia y la tecnología modernas, la tecnología del cultivo del salmón se ha vuelto más madura. Según el informe, la producción mundial de salmón alcanzó los 10.700 millones de dólares en 2007, y esa producción se ha multiplicado por más de diez desde 1982. El crecimiento de este mercado ha convertido a Noruega, Chile, Escocia y Canadá en los principales productores de salmón de cultivo.
El cultivo del salmón generalmente se puede dividir en dos etapas principales. En la primera etapa, los salmones nacen de los huevos y viven en tanques de agua dulce durante 12 a 18 meses hasta que se convierten en juveniles (o smolts). Luego los juveniles son trasladados a jaulas flotantes en el mar donde se crían durante aproximadamente 12 a 24 meses hasta que alcanzan un tamaño cosechable. Este tipo de cultivo marino se llama maricultura.
Las granjas acuícolas comerciales modernas utilizan en su mayoría sistemas de recirculación acuícola (RAS), lo que hace que las granjas ya no dependan excesivamente de un suministro estable de agua dulce. Utilizando tecnología económica de control de temperatura, las granjas pueden acelerar o ralentizar el crecimiento del salmón para satisfacer la demanda del mercado. La aplicación de esta tecnología ayudará a mejorar la eficiencia de la cría y la calidad del producto.
A medida que la industria de la acuicultura se desarrolla, el alimento principal del salmón también ha sufrido cambios. Debido a la estabilidad de la producción mundial de harina de pescado, muchos mercados de harina de pescado han pasado a proporcionar alimentos para el salmón y otras especies marinas. Los nuevos avances tecnológicos han hecho de las proteínas vegetales un ingrediente importante en la cría de salmón, y la investigación en el diseño de alimentos continúa.
Los métodos modernos de cosecha de salmón están evolucionando hacia el uso de buques de carga húmeda para transportar el salmón vivo a las plantas de procesamiento, lo que mejora la calidad del pescado y reduce el estrés durante el procesamiento. Las mejoras en el entorno de crianza y el énfasis en el sacrificio humanitario del salmón son avances positivos en la acuicultura moderna.
Impacto ambiental y sostenibilidadSi bien la cría de salmón aporta beneficios económicos, también plantea preocupaciones sobre muchos problemas ambientales. Por ejemplo, los peces de cultivo pueden representar una amenaza para el salmón salvaje y otras especies marinas, en particular en términos de propagación de parásitos y enfermedades. Sin embargo, estos problemas también han impulsado a la industria a adaptarse constantemente y buscar métodos de cultivo más sostenibles.
ConclusiónEl proceso de cultivo del salmón ha evolucionado a lo largo de cientos de años, transformando la simple pesca en una compleja producción industrial. Cada vez que disfrutamos del salmón en la mesa, además de saborear su exquisitez, también deberíamos pensar en la tecnología de cultivo, los desafíos ambientales y los impactos ecológicos detrás de él, y comprender verdaderamente lo difícil que es obtener este preciado ingrediente y la necesidad de una producción sostenible. desarrollo. sexo. ¿Deberíamos repensar nuestras elecciones dietéticas para proteger estos deliciosos recursos marinos?