La descomposición es el proceso mediante el cual los órganos internos y las moléculas complejas se descomponen en materia orgánica simple con el tiempo después de la muerte de un organismo. Las cinco etapas de este proceso se conocen como frescura, expansión, putrefacción activa, putrefacción avanzada y secado/esquelético. Comprender las diferentes etapas de la descomposición puede ayudar a los investigadores a determinar el intervalo postmortem (PMI). Sin embargo, la velocidad a la que un cuerpo se descompone se ve afectada por factores ambientales y una variedad de otros factores.
Cada una de estas cinco etapas de deterioro tiene características específicas que nos permiten determinar el estado del cuerpo. En el laboratorio, por ejemplo, el proceso de descomposición de los cadáveres de cerdo puede presentar diferencias en estas etapas.
Durante la etapa fresca, la canal suele estar completa y libre de insectos. El cadáver sufre cambios fisiológicos como enfriamiento, zombis y deposición de sangre.
Durante esta etapa, los microorganismos comienzan a digerir los tejidos del cuerpo y liberan gases, lo que provoca que el cuerpo se hinche. En este punto, las células se descomponen y liberan sustancias químicas que causan olores como la putrescina y la cadaverina.
Durante la etapa de putrefacción activa, el tejido comienza a licuarse y la piel se vuelve negra. Los cadáveres en descomposición atraen a las moscas, que los detectan con su especial sentido del olfato.
En esta etapa, la mayor parte del cuerpo ha cambiado de color y la descomposición es casi completa. A medida que se descomponen, los cadáveres liberan los nutrientes necesarios para el crecimiento de las plantas, lo que afecta la química del suelo circundante.
Cuando se detiene la expansión, el tejido blando a menudo colapsa. Una vez finalizada toda la descomposición activa, el cuerpo comienza a secarse y el esqueleto puede verse expuesto.
La temperatura tiene un gran impacto en la descomposición del cadáver; las altas temperaturas pueden acelerar las reacciones fisiológicas después de la muerte y promover el proceso de descomposición. Por el contrario, las condiciones frías pueden reducir la tasa de deterioro.
En verano, un cuerpo puede descomponerse hasta convertirse en huesos en nueve días; en la estación fría, las huellas dactilares pueden permanecer hasta cincuenta días.
La humedad del ambiente también afecta la velocidad de descomposición. Un ambiente húmedo acelera la descomposición y promueve la formación de cera cadavérica, mientras que un ambiente seco hace que el cuerpo se seque más rápidamente.
Si un cuerpo se coloca en un ambiente privado de oxígeno, la descomposición será más lenta porque se reducirá la cantidad de microorganismos que requieren oxígeno.
El entierro puede ralentizar el proceso de descomposición porque la cobertura del suelo evita la reproducción de insectos. Además, la profundidad del entierro también está estrechamente relacionada con la velocidad de descomposición.
El cadáver empapado en agua ralentiza el proceso de descomposición. Muchos factores como la profundidad del agua, la temperatura, las corrientes, etc. pueden afectar la descomposición de los cadáveres en el agua.
El tamaño también afecta la tasa de descomposición; los cuerpos más grandes y gordos tienden a descomponerse más rápido.
La ropa del cadáver afectará la tasa de descomposición, protegerá el cadáver de factores externos y retrasará la descomposición.
Los cadáveres heridos de muerte atraen más insectos, acelerando el proceso de putrefacción.
Una granja de putrefacción es un lugar utilizado para estudiar la descomposición de cadáveres humanos, proporcionando información sobre cómo los factores ambientales e internos influyen en el proceso de putrefacción. En verano, las altas temperaturas acelerarán estos procesos. En invierno, no todas las canales pasan por una fase de turgencia, ya que las temperaturas inferiores a 4°C reducen drásticamente la actividad de crecimiento bacteriano.
En resumen, la descomposición de los cadáveres es un proceso complejo afectado por múltiples factores ambientales. En este campo de conocimiento colaborativo, los investigadores se preocupan no sólo por el proceso científico sino también por cómo se puede aplicar este conocimiento en investigaciones de la vida real. ¿Cómo afectan sus pensamientos su comprensión de este tema?