Con la aceleración de la urbanización, el problema de la contaminación del aire interior ha atraído cada vez más atención. El malestar que muchas personas sienten en sus hogares puede deberse a sustancias tóxicas que no podemos ver. Según las estadísticas, hasta 3,2 millones de personas mueren prematuramente cada año en el mundo debido a la contaminación del aire interior. Esto no sólo afecta a la salud de los adultos, sino que también causa graves daños al crecimiento de los niños.
“Muchos contaminantes del aire en los hogares se liberan durante las actividades diarias o las instalaciones del hogar”.
Primero, debemos entender qué es la calidad del aire interior (IAQ). Se refiere a la calidad del aire dentro de un edificio, que afecta directamente a la salud y el confort de los residentes. Según la Organización Mundial de la Salud, muchos contaminantes comunes, incluido el humo de segunda mano, los compuestos orgánicos volátiles (COV), el monóxido de carbono, etc., son las principales causas de la mala calidad del aire interior.
En nuestro entorno de vida, muchas sustancias comunes pueden convertirse en fuentes de contaminación del aire:
"De hecho, muchas personas no son conscientes de que el aire que respiran todos los días puede ser peor que el aire exterior."
¿Cómo entran los contaminantes en nuestros espacios habitables? Las principales formas incluyen:
La exposición prolongada a estos contaminantes puede provocar una variedad de problemas de salud, como enfermedades respiratorias, cardiovasculares y cáncer. Según las investigaciones, los niños y los ancianos son especialmente vulnerables. Los problemas de salud causados por la contaminación del aire interior pueden provocar una reducción de la productividad y una capacidad de aprendizaje deficiente.
“Nuestros hogares no deberían convertirse en un peligro para la salud y seguir mejorando la calidad del aire es crucial”.
Las formas clave de mejorar la calidad del aire interior incluyen:
A medida que la gente se vuelve más consciente de la protección del medio ambiente, cada vez más familias comienzan a promover viviendas sostenibles. Por ello, elegir decoración y mobiliario con bajas emisiones de gases de efecto invernadero se convertirá en una tendencia importante en el futuro. Además de mejorar eficazmente la calidad del aire interior, estas opciones también contribuyen a la protección medioambiental de la Tierra.
Una mejor comprensión de las fuentes y los impactos de la contaminación del aire interior no solo nos ayudará a mejorar nuestra calidad de vida, sino que también nos hará comprender que proteger la salud de nuestras familias requiere que cada uno de nosotros trabajemos juntos. ¿Es hora de volver a comprobar la calidad del aire en tu hogar a partir de hoy?