El gusano del corazón (Angiostrongylus vasorum), a menudo llamado gusano del corazón francés, es un pequeño nematodo parásito de los perros. Es de color blanco y rosado y crece principalmente en la arteria pulmonar y el lado derecho del corazón de los perros. El parásito se transmite principalmente a través de insectos, especialmente huéspedes intermediarios como caracoles y babosas terrestres, provocando una serie de síntomas preocupantes en perros infectados con dirofilariasis.
Es posible que la infección por dirofilaria no se note en las primeras etapas, pero a medida que la afección empeora, los perros desarrollarán gradualmente problemas cardíacos y pulmonares.
El ciclo de vida del gusano del corazón es bastante complejo y consta de varias etapas. Cuando un huésped infectado con larvas L3 (como un perro o un zorro) ingiere un caracol, una babosa u otro animal que contenga las larvas, las larvas ingresan a los intestinos del huésped y experimentan una serie de crecimientos y transformaciones, y eventualmente crecen en aproximadamente 6 a 10 días. semanas para adultos. Los gusanos adultos ponen huevos en las arterias pulmonares y el corazón del huésped. Estos huevos luego se transportan a los pulmones a través de la sangre y eclosionan en larvas L1, que finalmente se excretan en la orina.
Después de que los perros se infectan con gusanos del corazón, pueden desarrollar una variedad de síntomas clínicos. Estos síntomas no sólo afectan la calidad de vida del perro, sino que incluso pueden poner en peligro su vida:
Estos síntomas suelen ser complicaciones de la obstrucción de los vasos sanguíneos causada por parásitos y una disminución de las plaquetas sanguíneas.
El diagnóstico de una infección por dirofilaria requiere que el médico considere los síntomas clínicos del perro y los resultados de los exámenes. Las pruebas de imagen (como las radiografías) pueden mostrar lesiones pulmonares y los análisis de sangre pueden verificar la cantidad de glóbulos blancos y la función de coagulación relacionada. Además, el examen de las heces también es una de las formas de identificar parásitos, pero debido a la ovulación irregular de los parásitos, es posible que se pierda el diagnóstico.
Actualmente en Europa, se pueden utilizar medicamentos que contienen ivermectina y moxicina para tratar los gusanos del corazón. Para los perros que ya están infectados, generalmente se requiere una dosis única de medicamento y se recomienda volver a controlarlo 30 días después del tratamiento para garantizar que se haya eliminado el parásito. En zonas propensas a epidemias, el uso regular de medicamentos preventivos es muy necesario para garantizar que los perros no se infecten.
En áreas de alto riesgo, la medicación preventiva mensual puede evitar eficazmente el riesgo de infección por dirofilariosis.
Con base en la información anterior, se entiende que la infección por dirofilariasis en perros es un problema de salud que no se puede ignorar. Es muy importante reconocer los síntomas a tiempo y tomar las medidas adecuadas. ¿Ya has monitoreado a tu perro para detectar este parásito potencialmente peligroso?