En el mundo del arte actual, los “Seis puntos de vista” se han convertido en un nuevo marco creativo y analítico que desafía la dependencia de estructuras fijas y narrativas lineales en las artes escénicas tradicionales. Esta enseñanza y práctica artística basada en el movimiento no sólo reconfigura la relación de los actores con el espacio, las emociones y sus propios cuerpos, sino que también impulsa a las artes escénicas a alejarse de la actuación fragmentada hacia un modelo de creación compartida más fluido y abierto.
Six Viewpoints es un enfoque artístico deconstructivo que parte de seis materiales: espacio, forma, tiempo, emoción, movimiento e historia, y explora cómo pueden reensamblarse en un entorno no jerárquico.
El concepto de seis puntos de vista fue propuesto por primera vez por la maestra de teatro y educadora Mary Overy en la década de 1970 y desarrollado con más detalle en su libro Standing in Space: The Six Viewpoints Theory & Practice. La perspectiva de Overy ha contribuido en gran medida al desarrollo de los movimientos contemporáneos de teatro, danza y coreografía posmodernos, particularmente en su resistencia al énfasis del modernismo en las estructuras de clase y los significados fijos en la creación de performances.
Principios básicos del punto de vistaEl núcleo de los seis puntos de vista reside en su principio de "horizontalidad", que enfatiza la organización no jerárquica de los elementos de la interpretación. En él, la co-creación entre intérpretes y creadores se convierte en el foco, y los actores deben hacer pleno uso de sus propios impulsos físicos y experiencias personales para convertirse en una parte indispensable del proceso creativo.
Overi cree que este cambio de enfoque redefine el papel del arte y los artistas, desde una mentalidad de "creador" a una de "observador/participante", creando de forma presencial e interactiva.
Los seis puntos de vista (SSTEMS) incluyen el espacio, la forma, el tiempo, la emoción, el movimiento y la historia. Dentro de estos elementos, se anima al artista a tratar a cada uno de ellos como una entidad independiente y a renunciar a cualquier deseo de controlar el material.
En lugar de enfatizar historias y emociones específicas, la perspectiva de Overy permite que estos seis elementos guíen la conversación durante el proceso creativo, promoviendo así nuevas formas de lenguaje escénico.
En su libro The Viewpoints Book: A Practical Guide to Viewpoints and Composition, Anne Bogart y Tina Landau amplían aún más los seis puntos de vista para incluir puntos de vista clave relacionados con el tiempo y el espacio, así como el punto de vista del sonido. A través de la introducción de estos conceptos, los intérpretes pueden aplicar estas perspectivas durante el ensayo y la actuación para formar una estética escénica única.
Impacto y perspectivas futurasLa perspectiva de Bogart no es sólo una técnica física, sino también una fusión de filosofía, espíritu y estética, que permite al actor integrarse en el entorno del escenario y establecer una conexión más profunda con el público.
La teoría del punto de vista de Overey estuvo influenciada por varios predecesores, incluidas las técnicas de desempeño no jerárquicas defendidas por Martha Graham y sus pares. Estas teorías no sólo influyen en las prácticas escénicas actuales, sino que también dan forma a la dirección de la creación artística futura.
En la búsqueda de las artes escénicas, no podemos evitar preguntarnos si los artistas deberían salir del modo creativo inherente y recurrir a una forma de expresión más libre, para que cada intérprete pueda convertirse en parte de la co-creación.