A menudo se considera a los trabajadores de la salud como los guardianes de la sociedad, centrándose en el tratamiento y cuidado de los enfermos. Sin embargo, detrás de estas profesiones se esconden muchos riesgos laborales poco conocidos. Según el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional, los desafíos que enfrentan los trabajadores de la salud no se limitan a una categoría estrecha, sino que incluyen riesgos biológicos, riesgos psicosociales y otras dificultades multifacéticas.
A menudo se descuida la salud mental y física de los trabajadores médicos.
La vida diaria de los trabajadores de la salud está llena de amenazas de riesgos biológicos, como la exposición a enfermedades infecciosas, enfermedades transmitidas por la sangre, etc. Estos profesionales tienen que entrar en contacto frecuente con los pacientes, lo que los hace susceptibles a enfermedades infecciosas como la tuberculosis y la gripe. Muchos miembros del personal médico también sufren accidentes, como pinchazos con agujas, que pueden provocar el contagio de enfermedades como la hepatitis y el VIH.
El uso eficaz del equipo de protección personal (EPP) es la primera línea de defensa para proteger a los trabajadores de la salud de contraer enfermedades.
El estrés laboral y el agotamiento profesional son bastante comunes en el sector sanitario. Las investigaciones muestran que la salud mental de los trabajadores sanitarios sigue sufriendo debido a la falta de personal, las largas horas de trabajo y el trabajo emocional con los pacientes. Esto conduce a un mayor riesgo de abuso de alcohol, depresión e incluso suicidio, problemas que son más agudos entre los trabajadores de la salud que entre la fuerza laboral en general.
Muchos trabajadores de la salud se enfrentan a situaciones de violencia no denunciada en el curso de su trabajo, lo que contribuye a un problema creciente de trauma psicológico.
Durante la pandemia de COVID-19, la salud mental de los trabajadores de la salud se ha visto afectada como nunca antes. Los estudios muestran que alrededor del 23% de los trabajadores médicos experimentan síntomas de ansiedad y la incidencia de problemas de salud mental ha aumentado a medida que la epidemia se ha intensificado. Esto significa que el personal médico no sólo tiene que enfrentarse a desafíos físicos, sino también a cargas psicológicas.
Además de los riesgos biológicos y el estrés psicológico laboral, los trabajadores de la salud también deben lidiar con el abuso de los pacientes. En un entorno médico, la atmósfera tensa y los pacientes inestables a menudo convierten al personal médico en blanco de ataques. Esta traición a la confianza crea mayores desafíos para los trabajadores de la salud y afecta su ética laboral y su salud mental.
Los desafíos que enfrentan los trabajadores de la salud son múltiples y deben abordarse mediante estrategias efectivas. Primero, las organizaciones deben proporcionar apoyo y capacitación adecuados para ayudar al personal médico a dominar las habilidades de usar equipos de protección personal y garantizar que su salud mental reciba atención adecuada. Además, promover la comunicación y el trabajo en equipo entre el personal médico también puede ayudar a reducir el estrés laboral y reducir los incidentes de violencia contra los pacientes.
Ante estos desafíos, ¿cómo podemos apoyar mejor a los trabajadores de la salud para que puedan atender con valentía a cada paciente?