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El mundo oculto de los líquenes: ¿Por qué algunos hongos viven en simbiosis con una variedad de algas?
Los líquenes son organismos complejos y extraños que se forman a partir de una relación simbiótica entre hongos y algas o algas verdeazuladas (cianobacterias). Este modo de vida colaborativa no sólo es un milagro de la naturaleza, sino también una estrategia de supervivencia exitosa: aproximadamente el 20% de las especies de hongos eligen este camino. Los líquenes tienen una variedad de estructuras y funciones, y contienen innumerables historias sorprendentes detrás de ellos.
"Los líquenes son los hongos que descubrieron la agricultura".
Características básicas de los líquenes
Los líquenes suelen estar compuestos por hongos y sus algas simbióticas o cianobacterias, que les confieren propiedades fisiológicas y bioquímicas únicas que no se pueden conseguir cuando los componentes crecen de forma independiente. Las algas o algas verdeazuladas envueltas en los filamentos de los hongos producen compuestos orgánicos de carbono a través de la fotosíntesis, formándose una relación mutualista entre ambos. La parte fúngica proporciona a las algas protección contra el ambiente externo, al tiempo que obtiene agua y nutrientes del entorno circundante para mejorar la supervivencia.Relaciones simbióticas y su diversidad
Entre los líquenes conocidos actualmente, aproximadamente el 90% tienen algas verdes como parejas simbióticas. El género de algas verdes más común es Trebouxia, seguido de Trentepohlia. Estas algas simbióticas pueden sobrevivir de forma independiente en el mundo biológico así como en los líquenes, lo que demuestra que juegan un papel importante en el ecosistema.
Sistema de nomenclatura de los líquenes
Los líquenes y sus socios fúngicos a menudo comparten el mismo nombre científico, lo que hace que los líquenes sean aún más importantes en la clasificación de los hongos. Las algas o algas verdeazuladas tienen sus propios nombres científicos, y la denominación de las tres también implica relaciones ecológicas y evolutivas más complejas.Componentes fúngicos de los líquenes
En cuanto a la composición fúngica, alrededor del 20% de los hongos son capaces de formar líquenes. La mayoría de los hongos líquenes pertenecen al grupo Ascomycetes, que constituye aproximadamente el 98% de los líquenes. Esto hace que la posición de los líquenes en la biodiversidad sea aún más fundamental e importante. En algunos grupos también se pueden encontrar hongos no liquenificados coexistiendo con hongos liquenificados, mostrando la riqueza de la naturaleza.
Componentes fotosintéticos
Los componentes fotosintéticos de los líquenes se denominan fotobiontes o algas, y cada liquen puede estar asociado con varias algas diferentes. Esta flexibilidad significa que el hongo tiene una influencia significativa en la conformación de la morfología de los líquenes. Por lo tanto, la forma y la estructura de un liquen a menudo están determinadas por su componente fúngico más que por sus algas.Proceso de liquenificación
El proceso de formación de líquenes, llamado liquenificación, no es instantáneo sino que ocurre en varias etapas, comenzando con una mezcla de señales químicas captadas del entorno que estimulan a los hongos y las algas a entrar en contacto y fusionarse. Los científicos han replicado con éxito el proceso de liquenificación en el laboratorio, pero la evolución en la naturaleza puede llevar más tiempo.
El papel de los hongos parásitosAlgunos hongos están especializados en parasitar líquenes, llamados "líquenes parásitos". No se consideran parte de los líquenes, pero desempeñan un papel igualmente importante en el ecosistema. Estos hongos parásitos también pueden desarrollar sus propias formas de juego.
"¿Cómo afecta la relación de colaboración entre hongos y algas en este mundo oculto a nuestra comprensión de este hábitat?"
El estilo de vida de los líquenes revela muchos misterios sobre las interacciones entre los organismos en la naturaleza, y las investigaciones futuras continuarán ampliando nuestra comprensión de estos ecosistemas. A medida que profundizamos nuestra comprensión de la simbiosis de los líquenes, ¿cambiará esto la forma en que protegemos y gestionamos los ecosistemas?
