Cuando la gente piensa en la varicela o el herpes zóster, a menudo piensa en las molestas lesiones de la piel y el dolor que las acompañan, pero la vida después del virus de la varicela guarda secretos más profundos. La varicela es una enfermedad altamente contagiosa causada por el virus varicela zóster (VVZ). Este virus puede permanecer latente en el cuerpo durante muchos años después de la infección inicial hasta que se activa nuevamente y causa herpes zóster. La erupción no solo es un desafío fisiológico, sino también Implica la capacidad de resistir virus y el riesgo de complicaciones.
Varicela: efectos de la infección inicialLa varicela afecta principalmente a niños y adultos jóvenes y el período de incubación es generalmente de 10 a 21 días. Una persona infectada es contagiosa entre 1 y 2 días antes de que aparezca la erupción. La infección inicial suele provocar ampollas en la piel, acompañadas de otros síntomas como fiebre y malestar general.
Herpes zóster: el peligro ocultoLas complicaciones de la varicela pueden ser graves e incluir enfermedades como encefalitis y neumonía.
Aproximadamente un tercio de las personas infectadas con varicela desarrollarán herpes zóster más adelante en la vida, y el riesgo es mayor en las personas mayores. Los síntomas del herpes zóster incluyen dolor intenso y una erupción en un lado del cuerpo que generalmente tarda algunas semanas en sanar, pero el dolor puede durar más tiempo.
El misterio de la estructura y el genoma de los virusEn el 10-15% de los casos, el dolor puede persistir durante más de tres meses y evolucionar hacia una neuralgia posterior crónica.
El material genético del VZV consiste en un ADN bicatenario lineal de 126.000 nucleótidos. Su genoma contiene aproximadamente 70 marcos de lectura abiertos y su composición genética está estrechamente relacionada con otros herpesvirus, lo que indica una ascendencia común. Sin embargo, la historia evolutiva del VZV es relativamente única porque casi todos los clados del VZV se han determinado a través del análisis de la secuencia de todo el genoma viral.
Lucha contra el VZV: el papel del tratamiento y la vacunaciónLos medicamentos utilizados para tratar la varicela y el herpes zóster incluyen aciclovir y otros medicamentos antivirales. La vacunación es una forma eficaz de prevenir la infección por VZV. La vacuna de la cepa Oka/Merck se ha incluido en los programas de vacunación de muchos países desde 1995, lo que ha reducido significativamente la incidencia de la varicela.
La introducción de la vacuna no sólo ha reducido los casos de varicela, sino que también ha reducido las hospitalizaciones y las muertes debidas al VZV.
Si bien el desarrollo de la vacuna contra la varicela ha tenido un impacto positivo en la salud pública, existen preocupaciones sobre cuánto durará la inmunidad conferida por la vacuna. A medida que los adultos envejecen, su sistema inmunológico puede debilitarse, aumentando el riesgo de desarrollar herpes zóster. Por lo tanto, se desarrolló una nueva generación de vacunas como Shingrix para enfrentar este desafío y han demostrado buena inmunogenicidad y seguridad en diferentes grupos de edad.
A medida que la investigación continúa profundizándose, comprendemos cada vez más sobre este virus, pero su misterio sigue siendo fuente de profunda reflexión. El virus de la varicela permanece en nuestro cuerpo durante muchos años. ¿Es posible que nunca vuelva?