A lo largo de la historia, el ser humano se ha enfrentado continuamente a los problemas de salud derivados de la contaminación del agua, y el descubrimiento y la aplicación del cloro es, sin duda, uno de los hitos más importantes. Las propiedades desinfectantes del cloro eran conocidas desde hace mucho tiempo por los sabios de la antigüedad y con el tiempo esta tecnología ha evolucionado hasta convertirse en una parte importante del tratamiento moderno del agua.
Antecedentes históricos del cloroYa en 1894, los científicos habían propuesto la idea de añadir cloro al agua para conseguir un efecto "estéril". Luego, en 1895, la propuesta comenzó a ganar fuerza en los círculos académicos cuando otros expertos la respaldaron. De hecho, la planta de tratamiento de agua de Hamburgo, Alemania, comenzó a experimentar con agua clorada en 1893, pero el verdadero avance se produjo en 1897, cuando Metzting, Inglaterra, se convirtió en la primera ciudad en clorar completamente su suministro de agua.
Hitos del cloroEn 1905, se desató una epidemia de fiebre tifoidea en Lincoln, Inglaterra, debido a la contaminación del suministro de agua. En ese momento, un experto llamado Alexander Cruikshank Houston utilizó la tecnología del agua clorada para acabar con la epidemia con éxito. Esta tecnología utilizaba una solución concentrada de “cal clorada” y se implementó hasta 1911 para garantizar la seguridad de la calidad del agua.
"El cloro es un desinfectante eficaz que destruye los microorganismos causantes de enfermedades al oxidar las moléculas orgánicas".
En 1908, se realizó el primer intento de cloración continua del agua en el embalse de Boonton, en Nueva Jersey, EE.UU., y la tecnología fue rápidamente adoptada por los sistemas de agua potable de todo el mundo en los años siguientes. Con el avance de la tecnología, se hizo posible la producción de agentes clorantes y grandes cantidades de sal de mesa se convirtieron en gas cloro a través de electrólisis, lo que hizo que el uso del cloro fuera más común.
Como elemento halógeno, el cloro tiene poderosas propiedades desinfectantes y puede matar eficazmente los patógenos en las fuentes de agua, incluidas diversas bacterias y virus. Cuando se disuelve en agua, se convierte en ácido hipocloroso (HOCl) y ácido clorhídrico (HCl), que pueden penetrar fácilmente en la superficie de los patógenos y destruir sus estructuras celulares.
La cloración de choque es un método común de desinfección del agua. Se utiliza en piscinas, pozos, etc. para reducir las bacterias y las algas en el agua. Al agregar una gran cantidad de hipoclorito de sodio al agua, este proceso puede reducir rápidamente el contenido de sustancias nocivas en el agua y garantizar la seguridad del agua.
El desafío de la cloración"Todos los procesos de cloración se basan en un principio: eliminar los patógenos del agua para evitar posibles riesgos para la salud".
Sin embargo, el proceso de cloración no está exento de desafíos. Cuando el cloro reacciona con la materia orgánica natural del agua, produce compuestos llamados subproductos de desinfección (DBP), como trihalometanos (THM) y ácidos haloacéticos (HAA), que son potencialmente cancerígenos. La OMS señala que los riesgos para la salud de estos subproductos son mínimos en comparación con los riesgos que supone no esterilizar, pero aún así deben tomarse en serio.
Con los avances tecnológicos y una mayor conciencia sobre la salud, la dependencia del cloro está disminuyendo y las tecnologías alternativas como los sistemas de ósmosis inversa se están volviendo cada vez más populares. Hoy en día, los avances tecnológicos, desde la simple cloración a principios del siglo XX hasta los complejos sistemas de tratamiento de agua actuales, nos permiten obtener agua limpia de una forma más segura y eficiente.
En el proceso de infiltración de cloro no solo se esconde la continuidad de la sabiduría antigua, sino también la cristalización de diversas tecnologías innovadoras. ¿Significa esta transformación que tenemos más posibilidades cuando nos enfrentamos a desafíos de fuentes de agua desconocidas? ¿Vamos a explorar?