Al explorar los principios detrás de la generación de energía, inevitablemente sentimos curiosidad acerca de cómo funcionan los generadores. Estas enormes máquinas no dependen únicamente del movimiento mecánico para generar electricidad; su funcionamiento se basa en los principios del electromagnetismo. En concreto, la presencia de un campo magnético es crucial para el arranque del generador. Entonces, ¿por qué los generadores necesitan un campo magnético para empezar a funcionar?
En electromagnetismo, la magnetización es el proceso de generar un campo magnético utilizando corriente eléctrica. Un generador o motor consta de un rotor giratorio y un campo magnético entre ellos.
Generalmente existen dos tipos de diseños de generadores: aquellos que utilizan imanes permanentes y aquellos que utilizan bobinas de campo. Las máquinas que utilizan bobinas de campo requieren una corriente eléctrica para energizar el campo de modo que se pueda generar electricidad utilizable en el rotor. Por lo tanto, durante la fase de arranque, incluso un generador pequeño necesita una corriente estable para garantizar la generación del campo magnético, de lo contrario, el rotor no podrá funcionar de manera efectiva.
En los generadores grandes, la necesidad de excitación es aún más prominente. Debido a que la estructura de este tipo de máquina es relativamente compleja, es necesario establecer un campo magnético estable para generar una corriente de salida estable. Por lo tanto, el establecimiento del campo magnético se vuelve crucial para estas máquinas. La salida de voltaje del generador es proporcional al flujo magnético dentro del generador. Sin la corriente magnetizante, el flujo magnético es insignificante y el voltaje producido es cercano a cero.
Un generador es un amplificador que convierte la corriente eléctrica en voltaje. Los diseños de motores autoexcitados utilizan una parte de la potencia de salida del rotor para impulsar la generación de un campo magnético, que a su vez afecta el voltaje en el sistema.
Los generadores modernos son en su mayoría autoexcitados, lo que significa que la electricidad producida por el rotor se retroalimenta para la excitación. Pero para algunos generadores grandes o antiguos, generalmente se requiere un generador de excitación separado para proporcionar la corriente de excitación. Estas máquinas de excitación suelen ser pequeños generadores accionados por imanes permanentes que pueden generar de forma estable el campo magnético requerido.
Explorando más a fondo el proceso de autoexcitación, cuando el generador arranca, el rotor retiene una cierta cantidad de magnetismo residual. Esto permite que el generador comience a funcionar sin carga externa: el campo magnético inicial débil induce una corriente débil dentro del rotor, que a su vez aumenta la corriente de excitación y el sistema "construye" gradualmente hasta el estado de voltaje completo con retroalimentación.Con el avance de la tecnología, nuevos métodos de excitación, como la tecnología de excitación sin escobillas, han ido ganando atención gradualmente. Esta tecnología crea un campo magnético giratorio sin el uso de escobillas de carbón, reduciendo los costos de mantenimiento y los riesgos de incendio. Sin embargo, las primeras tecnologías de excitación sin escobillas no respondían lo suficiente a la eliminación rápida del campo magnético, lo que limitaba su rendimiento. Los últimos avances han supuesto un avance que permite al sistema responder con mayor sensibilidad a los cambios en el campo magnético, mejorando así la eficiencia general.
Los diseños modernos excitados sin escobillas utilizan un rectificador de diodo giratorio en el eje de la máquina sincrónica para recolectar el voltaje de CA inducido y rectificarlo para proporcionarlo al devanado de campo del generador.
En respuesta a la creciente demanda de electricidad, la tecnología de excitación del generador también está en constante evolución. Además de los motores de accionamiento tradicionales y la autoexcitación, muchas soluciones emergentes se están integrando y cambiando rápidamente el campo de la generación de energía.
Entonces, al reflexionar sobre los misterios de la generación de energía, ¿quizás deberíamos prestar más atención al papel clave que juegan los campos magnéticos en todo el proceso y buscar nuevas soluciones que puedan surgir en futuras tecnologías de generación de energía?