En la cambiante sociedad actual, la eficacia de la gestión de la tierra se está convirtiendo cada vez más en una cuestión importante entre los gobiernos y los ciudadanos. La tierra no sólo es la base de los recursos económicos, sino que también afecta la sostenibilidad de la estructura social y el medio ambiente. Por lo tanto, establecer un sistema confiable de información territorial es crucial para el desarrollo de toda sociedad.
Los sistemas de información sobre tierras eficaces pueden mejorar la transparencia del uso de la tierra, promover el crecimiento económico y reducir los conflictos.
La gestión de la tierra puede considerarse como un conjunto de procesos y sistemas que ayudan a los gobiernos y otras agencias a gestionar eficazmente el uso y la asignación de la tierra. Desde leyes y regulaciones hasta políticas fiscales, cada componente tiene un impacto profundo en la gestión de la tierra. Estos componentes se pueden agrupar en cuatro áreas principales:
La práctica de la gestión de tierras tiene una larga historia. Ya en 1533, la agrimensura y la recaudación de impuestos comenzaron en el norte de los Países Bajos. Con el tiempo, estas prácticas evolucionaron hacia métodos de gestión territorial más sistemáticos, como el sistema de reconocimiento catastral de Milán de 1760, que no solo se convirtió en la base de la tributación local sino que también sirvió como referencia para otros países europeos.
El papel de las organizaciones internacionalesLa gestión del territorio es un campo complejo y multidisciplinario que debe combinar conocimientos jurídicos, económicos y socioculturales.
A nivel mundial, muchas organizaciones internacionales participan activamente en la reforma de la administración de tierras y la apoyan. El Banco Mundial no sólo promueve reformas en materia de tierras y propiedad, sino que también trabaja para evaluar el estado de la gobernanza de la tierra en diferentes países. ONU-Hábitat se centrará en la implementación de los derechos sobre la tierra, la vivienda y la propiedad, con especial atención a la seguridad territorial de las mujeres.
Los institutos pertinentes de varias universidades también exploran e investigan la gestión de la tierra. Por ejemplo, la Escuela de Ciencias de la Geoinformación y Observación de la Tierra de la Universidad de Twente en los Países Bajos se especializa en el desarrollo de capacidades para la gestión de la tierra en países en desarrollo. La Universidad de Melbourne en Australia se centra en la investigación de la información geográfica y la infraestructura de datos espaciales. Estos estudios académicos son de gran importancia para el desarrollo de la gestión del territorio.
ConclusiónEn resumen, el establecimiento de un sistema eficaz de información sobre tierras no sólo puede mejorar la transparencia de la gestión de las tierras, sino también promover el desarrollo económico sostenible. A medida que se hace cada vez más evidente la naturaleza limitada de los recursos terrestres mundiales, la forma de mejorar aún más la eficacia de la gestión de la tierra en términos de legislación, reglamentación, finanzas y gestión de la información se convertirá en una cuestión importante en el futuro. Entonces, en este contexto, ¿cómo deberían los países ajustar sus estrategias de gestión de la tierra para hacer frente a las necesidades cambiantes?