La detección heterodina óptica es una técnica para extraer información en el rango de longitud de onda visible o infrarroja. El método codifica información en cambios en la fase, frecuencia o ambas de la luz y la compara con una señal de luz de referencia llamada oscilador local. Este método de detección no sólo mejora la precisión de la tecnología de imágenes, sino que también abre una serie de nuevas aplicaciones que son particularmente importantes en las ciencias de la vida.
La esencia de la detección heterodina óptica es utilizar la interacción entre señales de luz de dos frecuencias para descubrir información que es difícil de obtener.
En la detección heterodina óptica, los datos de frecuencia de la señal de referencia y de la señal a detectar son diferentes, lo que permite la generación de una señal de "frecuencia de batido" procesable. La clave de esta tecnología es que durante el proceso de detección, las señales actuales generadas por diferentes frecuencias de luz pueden ser procesadas e interpretadas por dispositivos electrónicos.
La detección heterodina óptica ha sido de interés desde 1962 y, con el desarrollo de la tecnología, esta tecnología se aplicó particularmente a los sistemas de imágenes sensibles al terreno y a la velocidad en la década de 1990. Al sintetizar la detección heterodina de matriz, los científicos pudieron enfocar la luz en un fotodetector único y asequible y extraer la señal de frecuencia de batido mixta de cada píxel virtual, formando un patrón fuerte y claro.La verdadera importancia de esta tecnología es que puede mapear la frecuencia de señales ópticas a frecuencias electrónicas, lo que permite realizar mediciones más sensibles.
En comparación con la detección entre frecuencias inalámbrica tradicional, la detección entre frecuencias óptica tiene enormes ventajas. Aunque las fluctuaciones más rápidas de las frecuencias ópticas hacen que sea difícil medirlas directamente de forma electrónica, la detección de heterofrecuencia óptica puede convertir eficientemente la señal a través de la absorción de energía de fotones y extraer de ella la información necesaria. Este proceso no sólo permite la detección precisa de señales, sino que también puede utilizarse para obtener imágenes de características a escala micrométrica, como lo demuestra la tomografía de coherencia óptica.
Al realizar la detección heterodina óptica, el desafío de maximizar la detección de señales es reducir el ruido y mejorar la relación señal-ruido. Una ventaja importante de este proceso es que la ganancia híbrida se produce durante el evento inicial de absorción de fotones, una dinámica que permite que el proceso de detección acceda directamente a la señal y la amplifique. Al aumentar continuamente la intensidad de la luz del oscilador local, los científicos pudieron minimizar los efectos del ruido impulsivo y las interacciones con otras señales.
En el contexto de la detección heterodina óptica, ¿cómo aplicar eficazmente estas tecnologías para la captura de imágenes se ha convertido en un tema candente en la investigación técnica actual?
Otro desafío clave es la detección y obtención de imágenes de matrices. Mantener la integridad de la señal óptica a una determinada velocidad se complica aún más por el modo en que funcionan los sensores de imagen de las cámaras digitales convencionales. Sin embargo, a través de la detección heterodina de matriz sintética (SAHD), los científicos han desarrollado un nuevo método de detección de múltiples píxeles que permite recibir muchas señales en un solo detector, formando teóricamente una matriz de imágenes virtuales.
Además, otro problema práctico de la detección heterodina óptica es cómo lidiar con el ruido. Muchas fuentes de ruido provienen del entorno y de diversos instrumentos, y la intensidad relativa de este ruido a menudo se puede gestionar y mitigar calculando datos de correlación sobre la señal. A través de una tecnología de filtrado electrónico eficaz, estas interferencias innecesarias se pueden eliminar de forma efectiva, mejorando así la perfección y la precisión de las imágenes.
A medida que la tecnología evoluciona, la detección heterodina óptica continuará ampliando su alcance de aplicación, incluidas las pruebas biomédicas, el monitoreo ambiental y la tecnología de imágenes de alta definición. Hoy en día, esta tecnología no sólo permite a los científicos obtener datos de investigación más profundos, sino que también allana el camino para futuros avances científicos y tecnológicos.
Finalmente, mientras exploramos cómo la detección óptica de heterofrecuencias lidera la ciencia moderna, tenemos que preguntarnos: ¿Cómo redefinirá la tecnología óptica futura nuestra comprensión del mundo microscópico?