En la vida diaria, la forma en que escuchamos y entendemos el idioma de los demás es la base para establecer una buena comunicación. La inteligibilidad del habla, es decir, la inteligibilidad del habla, es uno de los factores importantes que afectan la comunicación interpersonal. Los diferentes estímulos ambientales, la calidad del sonido y el ruido de fondo tienen un impacto significativo en esta inteligibilidad, especialmente en presencia de ruido.
La comprensibilidad del habla mide la comprensibilidad del habla en condiciones específicas y se ve afectada por múltiples factores.
El habla se considera el principal medio de comunicación entre humanos. Las expresiones del habla de las personas varían según la edad, el género, el idioma nativo y la relación social entre el hablante y el oyente. Por ejemplo, cuando una persona se encuentra en un ambiente ruidoso, tiende a hablar más alto y más claro para mejorar la comprensión de la otra persona.
Además, la inteligibilidad del habla también puede verse afectada por ciertas condiciones patológicas, como deficiencias del habla y de la audición. Los factores ambientales, incluidos el ruido de fondo, la reverberación y el rendimiento del sistema de sonido, pueden dificultar la transmisión y recepción de información.
El ruido de fondo y la reverberación excesiva tienen un impacto negativo en la inteligibilidad del habla. Este efecto se puede describir en términos de relación señal-ruido. Cuando los niveles de ruido de fondo están entre 35 y 100 dB, para lograr el 100% de inteligibilidad, la relación señal-ruido normalmente debe mantenerse en 12 dB. En relación con estos ruidos, el rango de frecuencia de las señales de voz está entre 200 y 8000 Hz, lo que hace que el impacto del ruido en diferentes frecuencias sea diferente.
La reverberación puede desdibujar el habla y afectar el reconocimiento de vocales y consonantes. Las señales del habla a menudo quedan enmascaradas por el ruido.
El efecto Lombard es un fenómeno en el que los humanos ajustan automáticamente su lenguaje en un ambiente ruidoso. Cuando hay ruido de fondo a su alrededor, las personas tienden a aumentar el volumen de su voz y cambiar la frecuencia y duración de su discurso. De hecho, estos ajustes mejoran enormemente la inteligibilidad del habla.
En comparación con las expresiones del lenguaje ordinario, el habla bajo el efecto Lombard no sólo es más fuerte, sino que también tiene características de frecuencia más claras.
Además del efecto Lombard, existen otros tipos específicos de habla que afectan la inteligibilidad. Por ejemplo, aunque el lenguaje de los gritos tiene un volumen alto, su inteligibilidad en realidad se reduce debido a la reducción de los detalles del audio. Además, se expresa un habla clara para facilitar la comprensión de las personas con discapacidad auditiva, y sus características incluyen una velocidad de habla más lenta y pausas más obvias.
El uso del lenguaje dirigido al bebé muestra una gramática simplificada y un vocabulario más fácil de entender, con cambios significativos en el tono y el ritmo.
A partir de diferentes modos de lenguaje, podemos ver que no importa cómo cambien las condiciones ambientales, la inteligibilidad del habla siempre está estrechamente relacionada con las necesidades de comunicación humana. En el entorno social y los métodos de comunicación en constante cambio, el efecto Lombard no solo nos recuerda que debemos ajustar los parámetros de comunicación, sino que también desencadena un pensamiento profundo sobre la naturaleza de la comprensión del habla. En este contexto, ¿ha considerado el impacto de su estilo de comunicación en los demás?