Una lesión de Lisfranc, también llamada fractura de Lisfranc, es una lesión en el pie que implica el desplazamiento de uno o más huesos metatarsianos del tobillo. La lesión debe su nombre al cirujano francés Jacques Lisfranc de St. Martin, quien observó este patrón de fractura en soldados de caballería en 1815 después de la Guerra de la Sexta Coalición.
El mediopié contiene cinco huesos que forman el arco del pie: el cuboides, el navicular y tres huesos cuneiformes, y se articula con las bases de los cinco huesos metatarsianos. Una lesión de Lisfranc implica daño a estas articulaciones, generalmente daño a los ligamentos entre el hueso cuneiforme medio y las bases del segundo y tercer hueso metatarsiano, conocidos como ligamentos de Lisfranc.
La causa principal de una lesión de Lisfranc es la energía cinética excesiva aplicada al mediopié, generalmente en un accidente de tráfico o industrial.
En el caso de lesiones de alta energía en el mediopié, como una caída desde una altura o un accidente de tráfico, es relativamente fácil diagnosticar una lesión de Lisfranc. Esto suele ir acompañado de una deformidad del mediopié y anomalías radiográficas importantes. Pero el diagnóstico es más difícil en el caso de incidentes de baja energía, como un esguince al correr o una caída de un jugador de fútbol americano.
Clasificación de las lesiones Las lesiones de Lisfranc se pueden dividir en tres categorías:Una radiografía típica revelará un espacio entre las bases del primer y segundo dedo del pie.
Las opciones de tratamiento incluyen tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos. Un estudio sugiere que, en el caso de los deportistas, si la dislocación no es mayor a 2 mm, se puede utilizar un yeso durante seis semanas sin poner peso sobre la extremidad lesionada. En la mayoría de los casos, se recomienda la reparación quirúrgica temprana del fragmento óseo.
El proceso de recuperaciónPara las lesiones graves de Lisfranc, la reducción abierta y fijación interna (ORIF) es el mejor tratamiento.
La rehabilitación de una lesión de Lisfranc implica ejercicios de fortalecimiento y entrenamiento de actividad después del período de curación inicial. Cada vez más personas están empezando a utilizar masajeadores de pies EMS para estimular la actividad muscular, reducir la rigidez y mejorar el flujo sanguíneo en el pie afectado. Su eficacia depende del uso correcto y de la aprobación de un profesional médico.
Antecedentes históricosDurante las Guerras Napoleónicas, Jacques Lisfranc de St. Martin se encontró con un soldado que tenía vasos sanguíneos dañados en los pies y gangrena secundaria tras una caída de su caballo. Posteriormente le amputaron el dedo a la altura de la articulación del mediopié, de ahí el nombre de esa zona, "articulación de Lisfranc". Aunque Lisfranc no describió un mecanismo de lesión específico ni un esquema de clasificación, hoy en día las lesiones de Lisfranc se refieren a dislocaciones o lesiones por fractura-dislocación de la articulación metatarsiana.
Es importante tener en cuenta que las lesiones de Lisfranc también pueden diagnosticarse erróneamente como otros tipos de fracturas de pie, como las fracturas de Bosworth, las fracturas-luxaciones de Chopart, las fracturas de Jones y las fracturas de March. Aunque estas lesiones son diferentes, a veces presentan síntomas clínicos y hallazgos de imagen similares.
Mientras continuamos llevando una vida activa, ¿sabe cómo prevenir y tratar eficazmente las lesiones de Lisfranc, una lesión horrible que puede provocar una discapacidad a largo plazo?