En el mundo jurídico, el significado de la palabra "prejuicio" varía según los diferentes sistemas jurídicos (como el derecho penal, el derecho civil o el derecho consuetudinario), lo que hace que tenga significados técnicos específicos en diferentes contextos jurídicos. Cuando se desestima un caso, se puede manejar con o sin prejuicios, una medida que es crucial en el proceso legal.
En términos generales, las acciones sesgadas son definitivas. Si un caso es desestimado por mala conducta, las partes no podrán volver a presentar el mismo caso.
En el sistema legal estadounidense, cuando un caso penal se suspende debido a errores o mala conducta, si se desestima sin perjuicio, el acusado aún puede enfrentar la posibilidad de un nuevo juicio, mientras que una desestimación con perjuicio hace que el estatus del acusado sea equivalente; Fue declarado inocente y posteriormente no pudo ser procesado nuevamente. Esta norma surge de la cláusula de doble incriminación de la Quinta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que prohíbe a cualquier persona enfrentar dos penas por el mismo delito.
La existencia de la "cláusula de doble incriminación" significa que una vez que un caso llega hasta cierto punto a la etapa de juicio, el resultado de la desestimación después de su conclusión ya no se puede plantear.
No sólo eso, también hay desestimaciones parciales e imparciales de casos civiles. Si el caso es desestimado por cualquier motivo y no se puede volver a presentar, el fallo se vuelve definitivo y el caso no se puede volver a juzgar. Este documento se conoce comúnmente como "res judicata". Un despido sin perjuicio mantiene abierta la demanda y las partes aún tienen la posibilidad de volver a litigar la demanda en el futuro.
Desde un punto de vista semántico legal, un despido "perjudicial" es similar a un final cerrado, que garantiza que el tribunal ya no considerará ni reabrirá un asunto. El sistema judicial refleja consideraciones de conservación de recursos y evitar la repetición de demandas fallidas, reduciendo así disputas legales innecesarias.
En muchos sistemas de derecho consuetudinario (como los Estados Unidos, el Reino Unido, Australia, etc.), una vez que un caso se desestima con "perjuicio", los derechos legales de las partes se verán fundamentalmente privados y ya no serán poder presentar las mismas reclamaciones litigiosas.
Al mismo tiempo, una desestimación “sin perjuicio” normalmente permite a una parte volver a presentar el mismo caso o uno similar en una fecha posterior. Estos arreglos se utilizan a menudo para abordar cuestiones técnicas o procesales, mediante las cuales las partes pueden remediar la situación procesalmente y luego reiniciar el procesamiento.
La aplicación de este principio no sólo protege los derechos legales de las partes, sino que también garantiza la equidad del proceso legal, porque en algunos casos, las partes pueden no expresar plenamente sus reclamos legales debido a omisiones.
En la búsqueda de la reconciliación también se aplica el término “sin prejuicios”. Por ejemplo, en las negociaciones para llegar a un acuerdo, cualquier documento o conversación con la etiqueta "sin prejuicios" no debe admitirse como prueba ante el tribunal. El propósito de esta medida es proteger la libertad de comunicación de las partes durante el proceso de solución y promover el consenso y la solución entre las partes.
Debido a que el contenido transmitido es inherentemente privado en las negociaciones de conciliación, la ley es clara en cuanto a que dicha información no puede usarse en los tribunales para respaldar los reclamos de una de las partes.
En resumen, los casos desestimados con "perjuicio" no pueden volver a juzgarse, lo que refleja el rigor y la finalidad de los resultados de las sentencias del sistema legal. Esto no es sólo un uso eficiente de los recursos judiciales, sino también una garantía de equidad jurídica. En una sociedad jurídica moderna, ¿cree que dichas normas jurídicas pueden proteger mejor los derechos e intereses de cada parte?